Joan Miró
Interior holandés  


Hendrick Martensz. Sorgh - El tañedor de laúd (1661)

 

Autor: Joan Miró (1893 – 1983)
Tipo de obra:

Estilo: Surrealismo

Cronología: 1928

Descripción y análisis de la obra:

El interior holandés es una de las obras más representativas de la época central en la creación de Joan Miró. Apartado ya de las influencias fauvistas y cubistas, a partir de 1925 encuentra por fin un universo propio, una forma de pintar en la que se encuentra definitivamente a gusto. Es la búsqueda de lo esencial, depurando cada vez más su vocabulario expresivo.

Es como si hubiera sufrido después de su periodo de juventud un “desaprendizaje”, pasando de las figuras a los ideogramas y los signos; de un trazo sabio, adulto y serio a otro infantil, ingenuo y lúdico. 

Los pintores neerlandeses, como Vermeer y los maestros del siglo XVII , causaron un gran impacto en el artista, que compró postales coloreadas de estas pinturas, y a su regreso a París se dedicó a la creación de una serie conocida como Interiores holandeses. Realizó numerosos dibujos para la consecución de la primera pintura Interior holandés I , inspirada en El tocador de Laud de Hendrick Martensz Sorgh, aquí, en esta serie, Miró transformó, la pintura de sus sueños surrealistas.

La estructura de la obra es es apariencia compleja, pero si nos guiamos por el cuadro de Hendrick Martensz, podemos realizar una descripción bastante ajustada. En una habitación de dudosa estructura tridimensional, en la que cada pared tiene un color diferente, aunque, se puede observar un indicio de perspectiva, surge la figura de un guitarrista, cuya cabeza simplificada al máximo está rodeada de un halo blanco de donde salen un pequeño bigote descolocado y un mechón de cabellos que parecen rodear a una pequeña oreja. 

Ojos, nariz y boca permanecen dentro de un círculo de color ocre. El guitarrista sujeta el instrumento, quizá lo más reconocible de toda la composición, mientras se ve rodeado por una multitud de animalillos, plantas y pequeños objetos que parecen bailar al son de la música. La simplicidad es extrema, los colores, planos, se enmarcan en líneas muy definidas.

Una ventana abierta a la izquierda deja ver un paisaje igual de alucinante que el interior de la sala. Todo está dotado de una imaginación y creatividad entre genial e infantil, como en resumen toda la pintura surrealista de Miró.

Aspectos técnicos y estilísticos:

El arte de Miró es el resultado de un proceso de simplificación de la pintura que tiende a reducirla a sus elementos esenciales: línea, color y composición. A partir de ellos construye un cosmos propio, en el que los objetos no aparecen como son en la naturaleza, sino como signos muy simples de su universo interior. Así como Picasso es el modelo de artista polifacético que innova constantemente, Miró es el prototipo del que escoge un camino concreto y profundiza en él para aportar una sólida y homogénea creación.  Es el primer autor que pone imágenes al surrealismo, pero con un lenguaje absolutamente personal.

El color se aplica de forma plana. sin modulaciones. Esta obra contiene aún gran variedad de colores. pero el proceso de simplificación de Miró le llevó a reducir la gama hasta utilizar casi exclusivamente los colores primarios -rojo, amarillo y azul- separados entre sí por el negro o el blanco. A menudo hay líneas que actúan como elementos unificadores de la diversidad de objetos, constituyendo verrdaderas confabulaciones entre formas diversas que permiten expresar el sentimiento en el microcosmos de Miró. Los signos con que pinta los objetos se irán definiendo y simplificando a lo largo de su obra, hasta convertirse en verdaderos ideogramas.

Así, su pintura constituye una auténtica caligrafia en la que el arte consiste en la manera de elaborar el signo. La composición es básicamente intuitiva y recurre al equilibrio tectónico entre lineas y manchas de color. Muy pocos artistas han sido capaces de crear sirviéndose de tan pocos elementos. La fuerza plástica de su pintura reside en la viveza de un color propio de una sensibilidad mediterránea.

 
Pàgines de batxillerat humanístic i artístic. Javier Arrimada 2010