Brunelleschi: San Lorenzo (Florencia)

Brunelleschi es el auténtico renovador del estilo renacentista; en las iglesias de San Lorenzo y del Santo Spirito va a adoptar todos los el ementos arquitectónicos clásicos inspirándose especialmente en las basílicas romanas, la planta en forma de cruz latina, con tres naves -siendo la central más amplia que las laterales-, capillas laterales ciegas y cubierta plana a la nave central, de inspiración netamente clásica. Incluye también frontones, entablamientos, capiteles y otros numerosos el ementos constructivos cogidos de la arquitectura, de la Roma clásica.

En la iglesia de San Lorenzo, construida a intervalos desde1421 hasta bien entrado el siglo XV bajo el patronazgo de la familia Medici, los círculos, semicírculos, rectángulos y cuadrados se mezclan, como en los Inocentes, sin un corte claro, ocupando todo el sistema de módulos de superficie y espacio, disminuyendo en progresión, conforme se va bajando la vista por la nave.

En esta iglesia Brunelleschi sustituyó las formas complejas y sistemas góticos por la idea el emental de una basílica de los primitivos cristianos. Las arcadas de la nave, sostenidas por columnas corintias sin estrías, soportan un muro liso, sin triforio, traspasado por una claraboya de ventanas arqueadas. Las naves laterales están cubiertas por bóvedas de pechina, sostenidas sobre arcos transversales, y flanqueadas por pilares corintios; la nave central se encuentra techada por un artesonado liso, cuyas cuadrículas dan lugar a una oportuna representación gráfica, con la que se compensa el desajuste espacial interior. El suelo ayuda al conjunto con sus rayas, graduando el retroceso en perspectiva, y las proporciones entre la anchura de los huecos, la altura de las columnas y la de los arcos.

La Sacristía Vieja, llamada así porque un siglo después Miguel Ángel levantó en el extremo opuesto otra que sería conocida como "la Nueva", es uno de los ejemplos de rigor, del equilibrio y de la difícil simplicidad que tienen todas las obras de Brunelleschi. Una sala cúbica cubierta por una cúpula nervada dispuesta sobre pechinas. Al lado otro espacio más pequeño, cubierto también por otra cúpula semiesférica sobre pechinas. Óculos en la cúpula, pilastras corintias, uso de la piedra serena, encuadres de las ventanas y puertas con frontones triangulares... son los procedimientos constructivos típicos de la capilla.


Leon B.Alberti. Palazzo Rucellai

 

La principal contribución al arte del humanista Leon Battista Alberti son los estudios y escritos recopilados en tratados donde se recogen las teorías artísticas del momento. En las fuentes clásicas busca la perfección. La armonía y la belleza. Estudia y mide, durante años, los monumentos romanos, que le atraian especialmente y de donde extrae las leyes sobre las proporciones.

El mercader florentino Ruccellai le encarga el proyecto de su palacio. Las obras se iniciaron en 1446 dirigidas por Bernardo Rosellino. El palacio se organiza entorno a un patio central siguiendo la disposición de una domus romana. La novedad de la obra la encontramos en la resolución de la fachada. Alberti diseña tres pisos separados por sendos entablamientos que generan una serie de grandes franjas horizontales. Para evitar la excesiva monotonía de los pisos los decora con una serie de pilastras verticales. En la planta baja son de orden toscano, en el segundo piso ónicas y en el piso superior corintias. Superposición de órdenes que denotan la influencia del Anfiteatro Flavio y del Teatro Marcelo.

 

El muro presenta un suave cojinado, técnica que consiste en resaltar los sillares rebajando los cantos. Las ventanas son geminadas y quedan inscritas en arcos de medio punto. El artista, sobre unos elementos medievales, da una solución renacentista. Desaparece la torre defensiva medieval y el edificio queda integrado en la arquitectura urbana como muestra del nuevo espíritu.

A pesar de esto, el resaltado y la solidez del piso inferior, con estrechas puertas adinteladas, manifiestan el poder de sus habitantes. La prioridad del piso central queda remarcada al situar los escudos de la familia Rucellai sobre algunas de las ventanas. La airosa cornisa que corona el edificio proporciona unidad al conjunto.

La labor del ingeniero consiste en ordenar el espacio tanto en planta como en alzado. Líneas horizontales y verticales, curvas y ángulos, huecos y paredes se organizan de tal manera que dan a la fachada un singular ritmo. Otros tres grandes ejemplos de este tipo de arquitectura son el palacio Médici-Ricardi, construido por Michelozzo, el palacio Pitti, el aspecto del cual se atribuye a Luca Fancelli, y el palacio Strozzi, donde se superponen los órdenes toscano, jónico y corintio, un recurso que fue utilizado tambien en construcciones posteriores.


Bramante: Sant Pietro in Montorio

 

San Pietro in Montorio es un templo erigido en el lugar en el que, según la tradición, había sido crucificado San Pedro. La planta es de simetría central, y ya había sido utilizada en la antiguedad en los monumentos funerarios, en los templos de Vesta y en los Tholos griegos, en determinados enterramientos romanos y en los martyria paleocristianos. Pero Bramante además vió en la forma circular la mejor expresión de la racionalidad renacentista. En su proyecto, este pequeño templo se situaba en el centro de un claustro circular, rodeado de columnas, que luego no fue construido. La idea pues no es del todo original de Bramante, posiblemente conoce los desarrollos y experimentos de Leonardo sobre plantas radiales. Un cuerpo central en forma de nichos del que se proyectan hacia el exterior líneas que tocan las columnas del peristilo, la colummata exterior y los nichos en forma de capillas que rodean a las columnas. El resultado sería una estuctura radial de todas las formas y espacios desde el centro hacia afuera, como los cristales de nieve, los rosetones góticos o los pétalos de las flores.

Se emplea en su construcción el travertino y el mármol, ambos de tradición clásica romana, sobre un basamento circular formado por tres escalones circulares que le proporcionan cierta perspectiva. Encima coloca dieciseis columnas de dórico toscano (base ática, con plinto, fuste liso, collarino y capitel con equino y ábaco) sobre el que descansa un entablamiento circular con arquitrabe, friso con triglifos, metopas con símbolos religiosos, y una cornisa, todo ello coronado por una balaustrada, que configura el segundo piso.

El conjunto se completa con un tambor, en el que se alternan las ornacinas, con capillas rectangulares, y una cúpula semiesférica, con los nervios apenas insinuados. De esta manera conjuga armónicamente los elementos arquitrabados y los elementos cubiertos por bóveda de la arquitectura romana, en un tipo de arte que no era simplemente imitativo, sino que adopta este lenguaje para obtener soluciones apropiadas para su época.

La cella presenta un muro exteriuor articulado por medio de nichos con remate semicircular, de concha venera, que alternan con vanos adintelados. Nichos y vanos se separan por pilastras, cada una de ellas se corresponde con una de las columnas del pórtico. Esta articulación se dispone rítmicamente, partiendo de la existencia de cuatro puertas en los extremos de los dos ejes del círculo que se cruzan perpendicularmente a modo de cardo y decumano; cada paño de muro situado entre las dos puertas se organiza a su vez mediante un vano-ventana central flanqueado por dos nichos.

San Pietro in Montorio es de pequeñas dimensiones, ya que su diámetro interior tiene 5 metros, su diámetro total es de 10 metros y la altura máxima es de 12,50 metros. Con este edificio Bramante propone un nuevo tipo de exteriores arquitectónicos, dispuestos en profundidad y alejados de la disposición plana del primer Renacimiento (Quattrocento). La austeridad decorativa concede todo el protagonismo a la sobria robustez y pureza de formas que caracteriza el clasicismo arquitectónico. El edificio se configura como un conjunto unitario, tratado como una escultura, en el que se subordinan plenamente todos los elementos.


 

Renaixement i Manierisme

Arquitectura