TREBALLS GUANYADORS
1r. Primària
1r. Premi - LAIA SPIESS - "Las tijeras que no cortan"
2n. Premi - CARMEN TORRES - "La bota sola"
3r. Premi - MELANYE CARVAJAL - "La campana se pierde"
2n. Primària
1r. Premi - PAU CASTAN - "El águila"
2n. Premi - ALBA MARÍA - "La pulsera mágica"
3r. Premi - AINHOA ORELLANA - "La estrella"
3r. Primària
1r. Premi - JAVIER SANZ - "La letra E se ha perdido"
2n. Premi - MARCEL GINESTET - "El chico volador"
3r. Premi - RAQUEL MARTÍNEZ - "El gato que ladraba"
4rt. Primària
1r. Premi - PAULA DUARTE - "El lápiz que escribia solo"
2n. Premi - LAURA PÉREZ - "El cuaderno avaricioso"
3r. Premi - LAURA MINGUELLA - "Las aventuras de una dentadura"
Accèssit - VINICIUS MARQUES - "La cooperación"
5è. Primària
1r. Premi - MARIA CASTAN - "La bruja cosquillas y el brujo culodepapel"
2n. Premi - ALBA MONFORT- "Que divertida la escuela!"
3r. Premi - MARINA GUERAO - "Desastres en el zoo"
Accèssit - ARNAU GARCÍA - " No sabemos la suerte que tenemos"
Accèssit - LUCAS FOSCO - " Buone, el extraterrestre"
6è Primària
1r. Premi - MAITE TORRES - "La isla màgica"
2n. Premi - MARTA GONZÁLEZ - "En un pueblo de Sevilla"
3r. Premi - PAULA GIL - "Matias y Coco"
Había una vez unas tijeras que no sabían que hacer y habían decidido cortar un papel,
pero no cortaban y se fueron a dormir.
Laia Spiess
1r Primària
1r premi
Había una vez una bota que estaba sola, llamó a su amigo zapato y jugaron a futbol.
Carmen Torres
1r Primària
2n premi
Había una vez una campana que estaba perdida. Se encontró a un amigo.
La campana sonó y sonó y las encontraron a las dos.
Lucía Aznar
1r Primària
3r premi
El águila
Había un águila que vivió en un árbol y no tenía alas.
¿Cómo podía subir? El águila subía escalando.
Había una cosa que no le gustaba, no podía subir a las nubes.
Un día se encontró con otra águila y se hicieron amigas.
Los sábados y los domingos se iban a sus casas para jugar juntas a
vigilantes y policías.
Un día cuando el águila que no tenía alas volvió a las 12 a su casa, se durmió
y soñó que los piratas la llevaban prisionera y le hacían prepararles la
comida, lavarles las manos y hacerles las camas.
Pero se despertó y descanso.Pau Castan
2n Primària
1r premi
Había una vez una niña que estaba paseando por la playa y vio una tienda de pulseras.
Había de color rojo y verde , azul y amarillo , naranja y negro y muchos más .
Se compró la roja y verde que eran sus dos colores preferidos.
Cuando habían pasado unos días se dio cuenta de que la pulsera era mágica.
Podía hacer cualquier cosa: conceder deseos y tenía poderes.era muy bonita pero a la vez peligrosa.
La niña se lo dijo a todo el mundo pero nadie le creía. La niña pensó un deseo, ya sabía que pedir i
deseo, deseo, deseo que no esté esta pulsera.
¡Pom!el deseo se cumplióAlba María
2n Primària
2n premi
Había una vez una estrella que nunca brillaba por la noche.
Su madre le decía. Brilla estrellita o si no, no dormirás nunca.
La estrellita contestó:
-Sí, me dormiré algún día pero no sé cuando.
Una mañana ya no brillaba y brilló por la noche.Ainhoa Orellana
2n Primària
3r premi
¡¡LA LETRA "E" SE HA PERDIDO!!
¡¡¡Letra "e"!!! ¿Donde estás?
¡¡Ah!!... Hola "b", ¿que haces "a"?
Buscando a la letra "e", ¿tu la has visto?
No...- dijo "b"- ¿Puedo ayudarte?
Vale.Siguieron buscando por todo el abecedario y no la encontraron.
Quizás está fuera del abecedario.- dijo "b".
Pero si salimos podríamos morir.
Pero tenemos que intentarlo.- Dijo "b".- ¡¡¡Vamos!!!Siguieron buscando y buscando hasta que la encontraron en el frigorífico a punto de caerse.
¡¡¡Aaaaaaaahhhh!!!
¡¡¡Te tengo!!!- dijo "b".- Casi te caes, ¡ah!... Por cierto, ¿que haces aquí?
Iba caminando por el abecedario y el árbol me tiró de él.
¿Y ahora que hacemos para volver al abecedario?- Dijo "a".
¡¡Espera!! He visto una palabra con muchas letras... ella nos llevará.
Javier Sanz
3r Primària
1r premi
¿No te resulta raro un joven de unos veinte años que tiene alas? Este chico las tiene, escucha la historia...
Había una vez un joven que tenía alas, eran alas grandes y con plumas como la de los pájaros, pero no lo sabía nadie, quería mantenerlo en secreto porque si no estaría rodeado de gente que le admiraría. Cuando volaba se sentía libre, es mejor no contárselo a nadie y volar tranquilamente.
Marcel Ginestet
3r Primària
2n premi
A mi me gusta el perro y el gato y por eso voy a hacer una historia de estos dos animales...
Había una vez un gato que vivía en una casa. El gato fue a la habitación de la niña.
¡¡¡Guau, Guau!!!- Ladró el gato.La niña muy asustada le dijo a su madre:
¡¡¡Mama...!!! ¡¡¡El gato ha ladrado!!!
¿A si?- Exclamó la madre mientras cocinaba.- Lo tenemos que llevar al veterinario.Cuando ya estaban en el veterinario vieron que el gato no era un gato... Era un perro. La niña dijo:
Ya me parecía extraño.
Raquel Martínez
3r Primària
3r premi
Había una vez un lápiz que era muy extraño, lo tenías que ver …. ¡Escribía sólo! . Escribía la carta de los reyes, cartas… todo en general.
Un día el lápiz quería hablar con su dueño, no podía porque si lo descubrían se asustarían, pero a él le dio igual así que empezó a escribir:
-¡ Quiero que me ayudes!El niño como no sabía lo que era, se fue corriendo a la cama de sus padres. Se metió entre las sábanas. Pasó un tiempo, eran las 24:00h de la noche y el niño por fín salió de la cama de sus padres, y con cuidado fue a su habitación.
Vió que el lápiz ya había parado de escribir y sabía que necesitaba ayuda.
-¡Hola , yo soy Max! ¿ y tú? - le dijo Max.
- Soy Iván , el lápiz que escribe sólo.Se hicieron amigos y se guardaron el secreto.
Paula Duarte
4t Primària
1r premi
Había una vez un cuaderno de música. Un día vió un libro de música y dijo:
- ¡Yo quiero tener tantas páginas como tú!
- ¿ Por qué?- le preguntó el libre ¿ No te gusta ser como eres?
- No,porque se me gastan enseguida las páginas.A la mañana siguiente tenía 100.007 páginas.
- Me pesan mucho- se dijo a sí mismo el Cuaderno
-¿Por qué pones mala cara?- le preguntó el libro
- Porque me pesan la páginas- contestó el Cuardeno- me gustaría ser más grande.A la mañana siguiente era ten grande como una pizarra.
- No me puedo mover y peso mucho- se dijo a sí mismo
- ¿Qué te pasa?- le volvió a preguntar el libro
- Que me peso mucho y no me puedo mover- dijo el Cuaderno
- Yo de tí, volvería a pedir que fueras pequeño y con pocas páginas
- Sí, lo haré , no volveré a ser avaricioso.A la mañana siguiente el Cuaderno volvía a ser como siempre había sido.
Laura Pérez
4t Primària
2n premi
Las aventuras de una dentadura
Había dos veces… Una drácula que vivía en el país de Sangrilandia, que es donde viven todos los dráculas.
Tenía una dentadura con dientes afilados. Un día, paseando, se le cayó al suelo y cuando fue a cogerla, le mordió el dedo y le salió sangre.
La dentadura empezó a coger objetos: una gorra de un niño, una corona de la reina Draculina III…
Fue a viajar por ahí. Por fin llegó a América. ¿Sabéis quién vio la dentadura? Pues Michael Jackson, la dentadura le dio un mordisco y por eso murió.
Entonces fue a París subió a la Torre Eiffel y dio un grito de horror, pues detrás venía un crío con una piruleta. La piruleta se enganchó a la dentadura, la dentadura tuvo una idea, darle un mordisco a la piruleta del niño.
Llegó a España, mejor dicho a Barcelona, se puso a descansar en el tejado de un edificio pero una gaviota la cogió con sus patas y la arrojó al mar.
Allí un tiburón la cogió pero ¡No se la comió!
Laura Minguella
4t Primària
3r premi
Había una vez una ardilla a la que le gustaba el bosque. Vivía con las demás ardillas, las hormigas y otros animales en un árbol gigante. Se ayudaban para recoger comida para Navidad. Cuando venia un depredador se protegía. Resolvieron los casos hablando, compartían y siempre se ayudaban.
Vinicius Marqués
4t Primària
Accèssit
LA BRUJA COSQUILLAS Y EL BRUJO CULODEPAPEL
Hace mucho tiempo en medio del bosque había una barraca donde vivían dos brujos: la bruja Cosquillas y el brujo Culodepapel.
Siempre estaban discutiendo, eran como el perro y el gato. Si uno decía blanco el otro decía negro. La bruja Cosquillas trabajaba en el subterráneo, y en la puerta ponía: " prohibido entrar o iréis de cabeza a la cazuela". El brujo Caladepapel trabajaba en el desván y en la puerta ponía: "prohibido poner el culo y la nariz o os haré cosquillas de anís." La bruja Cosquillas para almorzar tomaba leche de foca y no se la dejaba probar a Culodepapel, en cambio su colega almorzaba cereales de ojo de rana y tampoco se los dejaba probar a Cosquillas.
Un día que el brujo miraba las musarañas, Cosquillas le quitó los cereales, pero cuando él se dio cuenta se los arrancó de las manos. Los cereales se cayeron por el suelo mientras ellos se tiraban de los pelos y resbalaban en los cereales. Cosquillas fue a parar dentro de la cazuela y Culodepapel dentro de la caja de pensamientos lilas. A partir de aquel día las discusiones eran aún peor. Hasta discutían a ver quién tenía más males. Un día la barraca empezó a hacerse pequeña. Ellos probaron algunos trucos que sabían: regaron la barraca con lágrimas de cocodrilo, la untaron con moco de elefante, pero nada les daba buen resultado.
Una noche a la luz de la vela Culodepapel le dejó su libro a Cosquillas y ella se lo prestó a Culodepapel. Entonces encontraron la solución. Era la cosa más fácil del mundo: leche de foca con cereales de ojo de rana y un beso de cada boca.
Mezclaron los ingredientes y Culodepapel echó un beso al aire, el beso salió disparado hacia arriba y cayó con muchísima fuerza en el centro de la cazuela. Cosquillas hizo lo mismo, pero su beso era como una estrella, y brindó con la botella y cayó como una estrella fugaz en el centro de la cazuela.
Entonces echaron la mezcla en una regadora y lo expandieron por encima de la barraca. Al cabo de unos días todo volvió a ser como antes. Cosquillas y Culodepapel seguían discutiendo pero antes de que subieran mucho el tono de voz uno de ellos decía: ¿te acuerdas del día en que preparamos juntos el encantamiento para la barraca?Y colorín colorado este cuento se ha acabado.
Maria Castany
5è Primària
1r premi
Había una vez una niña que se llamaba Corbata que hoy 25 de marzo cumplía años. Tenía escuela y a ella no le importaba ir, porque cuando era el cumpleaños de un alumno de la clase, la pizarra empezaba a hablar y hacer los dibujos que quería el alumno para su cumpleaños, a las gomas les aparecían ojos y boca, y si alguna ficha estaba mal la borraba para que la volvieran a hacer bien.
Los lápices, si no te salía una pregunta o si tenías que escribir, te lo hacían. Los libros con sólo tocarlos ya sabías todo lo que había escrito en ellos, los armarios, cuando ibas a dejar la chaqueta, sacaban unas manos y te la cogían y te la colgaban. Siempre ponían la música preferida del homenajeado y bailaban todo el día.
Las sillas también parecía que quisieran bailar, las mesas y los carpesanos. Todos los niños y niñas, de la clase se lo pasaban de maravilla. Corbata también porque bailaba con los carpesanos, las mesas, las sillas, etc.
En esas estaban todos, cuando de repente la pizarra, las gomas y el resto de muebles y objetos escolares pasaron de bailar. Los niños y las niñas miraron al reloj y se dieron cuenta de que eran las cinco de la tarde, y que ya se había acabado la fiesta.
Pero duró poco su tristeza porque al salir Corbata por la puerta vio a toda su familia y se puso muy contenta.
Alba Monfort
5è Primària
2n premi
Una vez en un zoo de Australia, los animales se preparaban para un día nuevo. Era un día muy especial porque llegaban nuevos animales y material nuevo al zoo.
Todos los animales se despertaron y se fijaron en un nuevo animal.
¡Eh, tu! ¡Tú , si tu!- dijo el león.
¿Que eres tú?
¡Yo! Yo soy un...okapi.
- Un oka ¿queee?
- Un okapi, respondió el animal.
- ¡Un okai! Creo que se lo que és. - Dijo la cebra.
Aún hablaban con el okapi cuándo la jirafa se dió cuenta de que en cada una de las jaulas había un artilugio nuevo.
El elefante pensó que serviría para beber agua y acercó su trompa al artilugio pero lo único que consiguió fué arrancarlo del suelo y tirarlo unas cuantas jaulas más allá.
La jirafa cojió prismáticos y aclaró.- Ha ido a la jaula de los suricatos.
Pobrecitos, dijo el elefante, iré a pedirles disculpas.
¡No! Si esos bichos estan locos.- dijo el león.
Y todos los animales se acercaron a sus comedores correspondientes para almolzar.
Esa misma noche, el león puso la tele y empezaron las noticias diciendo:
-¡ Desastre en el zoo! Dijo la presentadora. Los suricatos se han escapado.
Veis, dijo el león. Esos bichos estan locos.¡Ya os lo dije!
Y otro desastre en el zoo, siguió la presentadora. Los monos han empezado a tirar plátanos a la gente que pasa a su lado.
Y de eso ¿ que me dices león? Dijo la jirafa.
¡Qué raro! Algo pasa.
Los animales salieron un momentito de sus jaulas a observar el zoo.
¡No es buena idea león! Dijo el elefante.
Me da igual. Respondió él enfadado.
Un cuidador los vió y los encerró de nuevo en sus jaulas rápidamente.
Te dije que no era buena idea león, repitió el elefante.
¡No ha sido mi culpa! Chilló el león aún más enfadado.
Si ha sido, le dijo el elefante.
¡Basta! Chilló la jirafa. Ahora lo que importa es lo que nos pueda pasar.
Al día siguiente el zoo estaba cerrado y continuaría durante unos días más ya que las autoridades habían declarado el zoo peligroso. El león dijo que él descubriría lo que pasaba allí dentro. El elefante, el león y la cebra asomaron la cabeza en la cocina y entonces lo comprendieron. Max, el cuidador, estaba poniendo un medicamento especial que transtornaba a los animales. Hicieron fotos y las entregaron al director del zoo. Detuvieron a Max y esa noche en el telenoticias salian como héroes.
¡ Por una vez tenías razón, león !le dijo el león.
Muy graciosa, le dijo el león.
Y por eso, solo por eso, el león se sintió importante y el zoo volvió a la normalidad haciéndose famoso hasta el 2033.Marina Guerao
5è Primària
3r premi
No sabemos la suerte que tenemos
No sabemos valorar la suerte que tenemos, porque hay países en los que la gente no puede comer ni descansar a causa de las guerras que hay en ellos. Por eso quiero contaros este cuento.
En un país de África había un niño llamado Mohamed. Mohamed era un niño huérfano porque perdió a sus padres en la guerra. Su padre murió a causa de una explosión por salvar a Mohamed, a su hermano Marild y a su madre.
Su madre murió por culpa de unos soldados borrachos que la maltrataron. Fue una gran pérdida para Mohamed, el único familiar que le queda ahora es su hermano pequeño Marild.
Un día Mohamed se despertó en un edificio en ruinas junto a su hermano y salieron a ver si encontraban comida por la calle. Cuando caminaban escucharon algo. Eran unos soldados que iban disparando. Los niños al huir se encontraron en un callejón sin salida. El niño cogió rápidamente a Marild y se escondieron en el sótano un edificio abandonado. Al llegar los solados, a causa del polvo, Madrild estornudó. Un soldado al oírlo entró comprobar si veía a alguien pero como no vio a nadie empezó a disparar por todos los rincones del lugar. Por suerte no los alcanzó ningún disparo y los soldados se fueron.
Media hora más tarde Mohamed y Marild salieron para asegurar que ya no había nadie. Mohamed corrió hacia el desierto para esconderse y encontró una granja abandonada, entraron por si había suerte que encontró doce huevos. Por la noche Mohamed buscó un edificio en ruinas que el creerse que aguantaría y fue al más alto. Cuando llegó arriba cogió un huevo para los dos.
Más tarde cuando Marild ya estaba durmiendo aparecieron los soldados borrachos que mataron a su madre. Mohamed huyó por las escaleras de emergencia y se fue corriendo al desierto toda la noche. Estuvo tres semanas por el desierto hasta llegar al punto donde estaba la ONG que ayudó a los niños a encontrar una nueva familia.
Ellos tuvieron suerte pero aquí hay mucha gente que juega a juegos de guerra sin concienciarse de que hay mucha gente que muere por culpa de la guerra.
Por eso tenemos que nosotros tanta suerte, porque podemos comer cada día y no corremos el riesgo de morirnos. Nosotros deberíamos valorar mucho más la suerte de haber nacido en un país sin guerra.
Arnau García
5è Primària
Accèssit
Había una vez, en el año 2998, un extraterrestre llamado Buone. Era bajito, con la cabeza grande y calva- Iba con su platillo volador cuando vio un planeta, ni grande ni pequeño. Aterrizó en é, escondió su platillo volador entre unos matorrales y fue a explorarlo. Vio que había unas "cosas" muy altas y con vestidos muy extraños. Pensó en comprarse uno y se dirigió hacia la tienda de aquellos vestidos raros. Allí se compró uno a cambio de su ropa. Al salir de la tienda, Buone se chocó con una persona, no muy alta. A Buone, se le cayó el sombrero que había comprado y la persona se dio cuenta que era un extraterrestre.
Se lo llevó a su casa del árbol y le explicó que se llamaba Zancho y porqué la humanidad estaba en el planeta Scort, era por lo que a su planeta, estaban llegando los meteoritos. El extraterrestre le dijo que se llamaba Buone y que había llegado a ese planeta con su platillo volador. Buone se quedó a dormir en la casa del árbol.
Al otro día, Buone llevó a Zancho a que viera su platillo volador.
Cuando Zancho vio el platillo se quedó sorprendidísimo.
Entonces, Zancho fue a enseñarle su casa.
Buone le preguntó:
- ¿Por qué tu casa acaba en punta y la mía es redonda?
- Porque aquí nieva y si los tejados fueran planos se derrumbaría y se caería el tejado. Tu tejado es redondo porque… porque no lo sé- respondió Zancho.
El FBI se enteró que había un extraterrestre por el planeta Scort y se pusieron a buscarlo. Daban cinco millones de euros de recompensa a quien lo encontrase. El padre de Zancho que era un espía del FBI, oyó a su hijo con Buone y se lo dijo a su jefe. Enviaron diez hombres a recoger al extraterrestre. Encontraron en la casa del árbol, raptaron a Buone y se lo llevaron. El padre de Zancho recibió la recompensa, pero Buone y el jefe del FBI se pusieron de acuerdo y Buone se quedó en el planeta Scort a cambio de que le dejaran poner en un museo su platillo volador. Se quedó a vivir en la casa del árbol de Zancho. Y cuento contado ya se ha acabado.
Lucas Fosco
5è Primària
Accèssit
En una isla no muy lejana, (eso estaban estudiando en classe), había muchos animales según el libro del colegio. Laia quiso saber si esa isla existia (era muy curioso), y llamó a un pescador de la costa.
El pescador la acompañó a la isla. Pasaron horas y horas y no llegaban. Cuando ya se iban a rendir, vieron aparecer una palmera, después un acantilado y, por último una isla entera. Era muy bonita, con muchos animalitos: pájaros, monos y algún que otro buho. Laia se bajó de aquel barco y corrió hacia el acantilado, llevaba una camara de fotos y sacó un par de ellas. Aquel era un día especial para ella y para el pescador que cogió su red y la dejó allí, quería tener unas vacaciones.
Pasaron 3 horas y el pescador le dijo a la niña que si quería volver, que sus padres estarían preocupados, ella se negó. Le dijo que lo que ella quería era disfrutar al aire libre y aquella isla era un buen sitio.
A la mañana siguiente Laia quiso descubrir lo que ponía en ese libro de clase, así que empezó la marcha. Fue donde estaba la palmera y cogió el mapa que había enterrado bajo ella. Después siguyiendo el mapa fue al acantilado y vestida y todo se metió al agua (era lo que ponía en el mapa) la sorpresa o tesoro que había era aquella agua tan calentita que olía tan bien y te hacía desaparecer todos los dolores, piciores o cosas por el estilo.
A Laura no le gustó mucho, ella se pensaba que sería un tesoro de monedas o de chuches pero no agua, aunque se conformó. Nunca dejó de visitar la isla.
Maite Torres
6è Primària
1r. Premi
Un sábado como cualquier otro, en un pueblo de Sevilla, Marcos paseaba a su perro (que le llamaba Lunares) como salía hacer siempre. Ese sábado era raro, el cielo estaba nublado y no se veía el Sol por ningún lado.Marcos pensó que quizás el Sol saldría más tarde, no le dió demasiada importancia. Pasó otro perro corriendo al que Lunares quiso perseguir, tiró de la correa hasta conseguir romperla. Lunares corrió y corrió detrás de aquel perro que era la primera vez que lo veía. Marcos con miedo de no volverlo a ver gritaba su nombre ordenandole que volviera. Lunares seguía su camino. Llegó un momento en el que Marcos dejó de ver a Lunares. No sabía que hacer, si seguir buscándolo, llamar a su madre o a la policía. Pensó llamar a sus amigos y que cada uno buscara por un sitio distinto, seguro que lo encontrarían más rápido y así fue como empezaron a buscarlo.
Marcos será el capitán dijo uno de ellos.
Entonces yo os diré por donde buscaréis cada uno. Juan, tú iras en dirección a la plaza, José tú seras el que iras hacia la piscina, Miguel tú vete en dirección al campo de futbol y tú Manuel buscarás por los callejones, yo buscaré por los descampados. Al final nos reuniremos para ver quien lo ha encontrado.
Cuando se encontraron todos se dieron cuenta de que ninguno lo había encontrado. Gracias de todas las maneras- dijo Marcos- me habéis ayudado y eso es lo que cuenta.
¡ De nada! Respondireron todos.
De camino a casa Marcos vio un rabo de perro al final de la calle, era Lunares. ¡ Lo había encontrado! ¡Qué alegría!- dijo Marcos-. No te dejaré jamás, así fue como los dos volvieron a casa juntos y nunca más se separaron.Marta González
6è Primària
2n Premi
Un día cualquiera, Matías y su perro Coco, se despertaron y fueron a dar una vuelta por el pueblo, porque ya habían hecho todas las tareas de la casa entre los dos, y se aburrían mucho.
Fueron a dar una vuelta por el pueblo. Pasaron por la plaza y Coco se quedó porque le gustaba mucho jugar con la pelota roja. Matías, mientras, se fue a dar una vueltecita, y en la pared de la casa del alcalde vio un cartel enorme en el que estaba escrito: EXHIBICIÓN DE PERROS MAÑANA A LAS 18:00 DE LA TARDE. Y Matías corriendo se fue a buscar a Coco y se lo explicó todo, Coco lo entendió como si fuera una persona.
Matías y Coco se fueron a casa a coger todas las cosas que tenían para entrenar, después se fueron a la plaza para poner en forma a Coco. Por la tarde seguían entrenando y el alcalde les vio cómo se esforzaban, corriendo, saltando, estirando...Más tarde el alcalde se marchó a su casa.
Al día siguiente fueron a la exhibición y el alcalde les felicitó por el esfuerzo que habían hecho.Y por supuesto que, con tanto esfuerzo, ganaron el primer puesto.
Cuando llegaron a casa su madre y su padre les felicitaron y les compraron un regalo: una nueva casita para Coco. Allí jugaban los dos juntos felices comiendo perdices.Paula Gil
6è Primària
3r Premi
