Masaccio. La Trinidad (Florencia, iglesia de Santa María Novella).  1425-1428.

En esta interesante pintura Masaccio flanquea la imagen de la Trinidad por las figuras de la Virgen y de San Juan, que suelen figurar también, como intercesores en las representaciones del Juicio Final. Todo ello lo ha inscrito en una arquitectura fingida en la que el pintor ha situado las figuras. La impresión de que el muro se abre a un espacio más allá del mismo es posible gracias a la utilización de la perspectiva, cuyos principios acababan de formularse en Florencia poco antes de que Masaccio realiza esta obra.

Otro aspecto interesante de la obra es la presencia de las dos figuras que se arrodillan en los extremos inferiores. Se trata de los donantes, esto es, los que encargaron la obra a Masaccio.