En la imagen los iracundos pelean entre ellos o se inflingen a sí mismos lesiones a base de mordiscos. La sangre que mancha sus cuerpos da idea de su saña. |
Tadeo de Bartolo en el infierno del Juicio Final de la catedral de San Giminiano son los diablos los que atacan a los condenados por ira, al tiempo que éstos se sgreden a sí mismos, en este caso con cuchillos. |