Jueves, día 29: el equipo de operaciones ha intentado diariamente restablecer las comunicaciones con la Mars Pathfinder, y planea continuar durante una semana más a este ritmo. Si no se consigue recuperar el contacto antes del 4 de noviembre, las sesiones de emisión de instrucciones y escucha se espaciaran, y pasarán a tener frecuencia semanal o mensual. No se reciben datos telemétricos de la Pathfinder desde el 27 de septiembre. Después de esta fecha se consiguió en dos ocasiones recibir la señal portadora, pero sin que fuera posible establecer un enlace para recibir datos que permitieran determinar el estado de la nave
Los problemas comenzaron con el posible fallo de la batería, que afecta al funcionamiento del reloj. Además, al depender solamente de la electricidad suministrada por los paneles solares, tampoco se conocía la potencia disponible. Luego se investigó el cambio de frecuencia del receptor de radio a causa del descenso de 20 a 40 grados C de la temperatura. Actualmente, el equipo investiga la posibilidad de que el ordenador de la nave esté funcionando incorrectamente. "Quizá no consigue arrancar del todo", dijo el jefe de la misión Richard Cook. "El equipo está enviando varias veces al dia órdenes de reinicialización antes de intentar enviar otras órdenes".
"Por supuesto, el equipo científico continua procesando, catalogando y estudiando el enorme volumen de datos científicos que hemos recibido, que nos tendrá ocupados durante varios meses", dijo Brian Muirhead, director del proyecto.
Aunque aún queda alguna esperanza, lo más probable es que, tras la pérdida de la batería, los ciclos de dilatación y contracción diarios producidos por los cambios de temperatura hayan dañado irreparablemente el lander. Y el rover... probablemente esté junto al lander intentando comunicarse con él, como nosotros.
Cuando se recibió la última conexión, la Pathfinder había funcionado ya tres meses, un periodo de tiempo tres veces más largo de los 30 dias previstos inicialmente. Y el rover Sojourner llevaba ya superado por 12 el tiempo de vida previsto, de una semana. Enviaron 2.600 millones de bits de datos, incluyendo más de 16.000 imágenes obtenidas por el lander y 550 por el rover, más de 15 análisis químicos de rocas e innumerables datos meteorológicos. El último objetivo, la super-panorámica de alta resolución, que está siendo procesada, sólo se pudo completar en un 83%.
El jueves, día 22, continuaban los intentos para restablecer las comunicaciones con la Pathfinder. A pesar de las dificultades, el equipo confia en que la nave funciona todavía. Dado que el transmisor no se ha utilizado desde el dia 7, es probable su temperatura baje hasta -50 grados C a primeras horas de la mañana, y que no pase de -30 C por la tarde. Estas temperaturas son 20 grados más bajas que las más frias durante las comunicaciones anteriores, lo cual disminuye las frecuencias de los transmisores de radio. El equipo técnico intenta recuperar la conexión empleando una frecuencia más baja de lo normal, que va aumentando. Los expertos recomiendan ampliar el rango de frecuencias empleadas y estudiar el comportamiento de aparatos similares en pruebas de laboratorio.
El jefe del proyecto, Brian Muirhead, reconoce la posibilidad de que se haya producido un fallo irreparable. Al agotarse la batería, las variaciones térmicas diarias podrían haber dañado algún elemento irreversiblemente.
Todavía queda un gran volumen de datos del lander y el rover por analizar. Los resultados científicos se irán publicando a medida que estén disponibles.
El viernes, día 17 (sol 103), se intentó recuperar el contacto con el transmisor auxiliar mediante la antena de 70 m de Goldstone (California), sin éxito. Tampoco se obtuvo respuesta alguna al intentar activar el transmisor de reserva SSPA, utilizando una antena de 34m.
El jueves, día 16 (sol 102), fallaron de nuevo todos los intentos para recibir señales del transmisor principal o del auxiliar. Hace ya 9 dias que no se consigue establecer conexión. Sin embargo, el equipo de control todavía alberga esperanzas de recuperar el contacto mediante la antena de 70 m de Goldstone (California), suponiendo que los problemas se deban a temperaturas más bajas de lo normal.
El lunes, día 13 (sol 98), se intentó de nuevo conectar con el transmisor principal, a través de la antena de Madrid, pero no se recibió respuesta alguna. También se enviaron instrucciones para que la Pathfinder conecte el transmisor a medio dia, pero no se sabe si la nave habrá recibido las órdenes.
El domingo, día 12 (sol 97), tras haber detectado una señal que parecía provenir de la Mars Pathfinder, fue imposible captarla con una antena grande de la Deep Space Network.
El jueves, día 9 (sol 94), se intentó por tres veces conectar con el transmisor principal de la nave, desde la estación de Madrid, pero sin éxito.
El miércoles, día 8 (sol 93), se reunió el equipo de control para discutir el posible efecto del frio en el comportamiento actual de la nave. Es posible que las bajas temperaturas afecten al transmisor.
El martes, día 7 (sol 92), se consiguió recibir repuesta del transmisor principal, después de semana y media de intentar conectar a través el transmisor auxiliar, sin conseguirlo. La conexión, a través de la antena de 34 m de la estación de Madrid, en España, duró 15 minutos, según lo previsto. Según parece, la nave respondió a la orden que se le envió el dia 3, pasando al modo de operación NO-BAT (sin baterias), con el que utiliza solamente el suministro eléctrico que le proporcionan directamente los paneles solares.
El viernes, día 3 (sol 89), el equipo de control volvió a intentar la recepción de datos a través del transmisor auxiliar, pero no lo consiguió, quizás porque era demasiado temprano. Más tarde se probó a enviar órdenes para colocar la nave en el estado más seguro posible en caso de que la batería esté fuera de servicio, pero no se recibió respuesta alguna. El rover continúa a la espera: el dia 5 comenzará a hacer un recorrido alrededor del lander.
El jueves, día 2 (sol 88), se volvió a recibir la señal del transmisor auxiliar. A las 11:30, hora marciana, el ordenador de la nave se reactivó y desconectó el transmisor auxiliar. Se enviaron órdenes para desconectar la batería, pero no se sabe si se ejecutaron. Según parece, el problema puede estar relacionado con un fallo de la batería y sobrecarga del bus de datos.
El miércoles, día 1 (sol 87), se ordenó a la nave que pasase a utilizar el transmisor auxiliar, suponiendo que podría haberse producido alguna avería. Inicialmente no se captó señal alguna, pero a las 4:23 se consiguió por fin restablecer contacto durante unos 20 minutos. Se intentó activar el transmisor principal, sin éxito.