Aprendiendo a querer

Diálogos


Buenos y malos

     Me siento un poco triste y melancólica porque últimamente he visto muchas injusticias.

     "Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán hartos"
Ya ves, para hallar la felicidad verdadera, antes es preciso desearla, buscarla. Hay que pedir a Dios desde el fondo del corazón: "¡Hágase tu voluntad!"
Mucha gente sólo se dirige a Dios para quejarse, para pedir... En el fondo, le están diciendo: "Hágase mi voluntad"
Pero no podríamos alcanzar esa justicia ni hallar esa felicidad si no fuésemos libres.
Dios ha preferido correr el riesgo de nuestra indiferencia, de nuestro egoísmo, de nuestra crueldad.
No somos perfectos: "Sólo Dios es bueno". De modo que ¿nos vamos a extrañar de que se cometan errores, y horrores, si nosotros mismos somos capaces de cometerlos?

     No logro entender por qué hay algunas personas que son malísimas, de palabra, de corazón y de acción, y me encuentro que la vida les da en abundancia: no tienen limitaciones de ningún tipo, y van por la vida regando veneno, envidia, sembrando dolor.

     Son "hijos del diablo", aunque no lo saben. El dolor que siembran a su alrededor es el que brota abundantemente de su corazón solitario. Su vida es un anticipo del infierno:  sin sentido, soledad eterna...
Dan lástima. No les tengas envidia, por muy bien que les vaya.
A veces pienso que Dios es tan bueno que da incluso a los malos lo que desean en su corazón. Me parece oir lo que Jesús dijo de ellos: "Ya tienen su merecido". Y lo que les dirá: "Apartáos de mí, obradores de iniquidad".

     Por otra parte, diariamente veo cómo hay gente que se esfuerza con toda su alma para salir adelante, que transita por la vida sin causar daños, pero todo les sale mal... ¿Por qué?

     Son pobres, lloran... Si lo reconocen, y acuden a Dios, serán consolados.
Cuando veas una persona pobre, miserable, o medio corroída por una enfermedad incurable, a las puertas de la muerte, piensa que todos estamos en la misma situación lamentable delante de Dios. La única actitud razonable de un ser humano en presencia de Dios es gritar: ¡Misericordia!
Los que creen tener todo lo que necesitan están locos. No piden. No tendrán nada.

     Entonces yo pregunto... ¿Hay que ser malo para tenerlo todo en la vida?

     "Si no os hacéis como niños no entraréis en el Reino de los Cielos"
"Si alguien quiere ser mi discípulo, que tome su cruz cada día y me siga"
"¿De qué le sirve a uno ganar todo el mundo si pierde su alma?"
"Vende cuanto tienes y dáselo a los pobres, y tendrás un tesoro en el Cielo"
"No podéis servir a Dios y a las riquezas"
"Bienaventurados los limpios de corazón, porque verán a Dios"



Te escucho.
Si puedo, te daré un consejo.
En cualquier caso, rezaré por tí.

Escríbeme.



Aprendiendo a querer