Aprendiendo a querer

Diálogos


Ateo, materialista y escéptico

 
     ¿Tan grande para nosotros sólo?

     Voy a seguir tu juego, e intentaré adivinar a qué te refieres.
Efectivamente, el Universo nos viene algo grande. De todos modos, si es finito, es nada al lado de su creador.
Hace años me gustaba subir grandes montañas. Recuerdo que una noche, mi compañero de escalada dijo algo así: "Quizá lo haya hecho tan grande para achantarnos".

     Haces referencia a un creador que no veo, toco o siento.

     Dios no se podía ver o tocar, hasta que se hizo visible en Cristo.

     Soy medianamente aficionado a la astronomía y a la ciencia en general, y me defino como ateo,  materialista y escéptico.

     No te esfuerces en definirte. A nadie le gusta que le etiqueten. ¿Por qué te vas a encasillar tú mismo?
La consecuencia lógica de una visión materialista de la vida es vivir de espaldas a la muerte.

     No por mis ideas soy amoral o insolidario, aunque tampoco sea un ejemplo de lo contrario.

     Muy sincera tu afirmación... y muy profunda.
Has captado la amoralidad que supone ser un ateo consecuente. Si no hay Dios, no hay más ley que la del más fuerte... y Hitler tenía derecho a hacer lo que hizo, porque no existiría el Derecho.
En cuanto a lo de no considerarte un modelo, no te preocupe. Quienes se consideran modélicos suelen ser soberbios, se sobrevaloran, y desprecian a los demás.

     Veo estrellas, toco la tierra y siento pasiones; no dudo de que esas cosas existen.

     Existen, pero en ellas mismas no está la razón de que existan. No existen de un modo necesario. Nada de lo que observamos es necesario, nada tiene en sí mismo la exigencia de ser. Todo lo que se ve es contingente, es decir, no es necesario, podría no-ser.

     Y presuponiendo que Dios exista, ¿para qué hizo un universo tan grande? o ¿por qué no lo hizo un millón de veces mayor?

     Algunos  le dan la vuelta a la pregunta: partiendo del hecho de que estamos aquí, se preguntan si el Universo podría ser de otro modo (principio antrópico fuerte), y concluyen que no podría ser demasiado diferente. Pero Dios puede hacer el Universo como quiera, o no hacer ninguno.

     Creo que es más lógico pensar que estamos aquí porque el mundo es como es y que, si hubiera sido de otra manera, estarían otros en nuestro lugar haciendo comentarios parecidos.

     Ahí está el problema, en que la vida material requiere un sustrato químico complejo, que sólo se puede dar con unas condiciones precisas sumamente equilibradas al inicio del Big Bang.

     Creo que cuando mi cuerpo no me sostenga dejaré de existir para no volver nunca más.

     Eso es lo evidente, no hace falta "creerlo".
A pesar de esa evidencia, creo que, de algún modo, veré a Dios, Vida sin fin. Sólo Jesucristo ha dado razón de la vida humana, incluso del valor del sufrimiento. Y no ha dado muchas explicaciones racionalistas. Pero ha dejado claro el camino.

     ¿La vida no valía nada para los anteriores a él? ¿Qué sabía él de ciencia? El camino que él enseñó sólo difiere en detalles mínimos de lo que otros enseñaron: Confucio, Pitágoras, Alá, Buda, etc.

     ¿Detalles mínimos? La diferencia entre Dios y todo lo demás no está en detalles mínimos.
Él es la Vida, y vive eternamente. Los anteriores a Cristo están todos muertos.
El mundo es exactamente lo que Él ha pensado que sea desde toda la eternidad. ¿Quién le va a enseñar cómo es el mundo?

     ¿De todos los dioses es Jesús el único verdadero, tal y como se describe en los evangelios de manera literal?

     Sólo hay un Dios, y aunque nadie lo ha visto nunca (es espíritu), se puede decir que quien vio a Jesucristo vio a Dios..

     ¿Y el dios judío? ¿No es el mismo?

     Sí, y Alá.

     ¿O tuvo engañados a los judíos tanto tiempo?

     ¿Engañados? Mi Dios es el Dios de los judíos. Jesucristo es judío.

     Dar explicaciones religiosas no avanza nada, nos deja estancados. El amor es un sentimiento, un estado de ánimo de un individuo, La ciencia nos enseñará más sobre qué es y como funciona, así como sobre las relaciones entre mente y materia.

     Por eso se separan tantos matrimonios, porque confunden amor con enamoramiento, y cuando se les pasa, se quedan desconcertados.
Respecto a la relación entre mente y cerebro, aún tenemos mucho trabajo por delante los científicos antes de que podamos ponernos a enseñar nada.

     Como biólogo, dime: teniendo en cuenta el progreso de los conocimientos, ¿a dónde nos llevarán p. ej. 50 años más de estudio en las ciencias que estudian el cerebro?

     Soy biólogo, no adivino.
Lamento decepcionarte, pero no se pueden hacer extrapolaciones a largo plazo, y menos en ciencia y técnica. Es cierto que tras un descubrimiento "importante", una idea fecunda, sigue un periodo de desarrollo acelerado, pero limitado. En algunos casos ni siquiera se ha avanzado desde los primeros años: ¿Dónde están los androides que debían existir hace tiempo? Hay problemas por resolver que son más difíciles de lo que nadie hubiera podido imaginar.

     ¿No es prudente pensar que al final se descubra que el alma en su totalidad está soportada por la materia y sus relaciones?

     Tú lo has dicho: soportada. Como un programa de ordenador está en soporte magnético, CD-Rom, o cualquier otro. El "alma" de ese programa tiene carácter espiritual, por ser creación de nuestra mente, pero actúa mediante un soporte material. Así es el alma de cada ser humano, creada por Dios, pero en un soporte material.
Aristóteles la definía como la "forma sustancial" del cuerpo.

     Precisamente, Aristóteles decía que el alma moría con el cuerpo, por mucho que el escolasticismo haya torcido o "reinterpretado" sus palabras.

     Aristóteles dijo muchas verdades y algunas chorradas. La ciencia cabalga a lomos de gigantes, pero progresa porque intenta superar las deficiencias de sus predecesores. Eso es lo que hizo la escolástica con Aristóteles, y eso es lo que los filósofos actuales deberían hacer con S. Tomás.

     A mi pobre entender ya lo han hecho, especialmente el empirismo y sus secuelas.

     Hume y sus secuelas, como tú dices, no le llegan a los talones a Aristóteles ni a S. Tomás, que fueron capaces de hacer una síntesis del saber humano. Los empiristas ven el mundo por un canuto.

     No conozco a fondo la Filosofía...

     Da igual. Eres filósofo, porque buscas la verdad, porque no eres un papanatas, no te conformas con cualquier explicación.

     La Ciencia nos seguirá dando respuestas. Creo que ese problema será resuelto por científicos, y no por filósofos.

     Con sólo el método científico, y sin intuición creativa ni intencionalidad, nuestro conocimiento sería poco superior al de los chimpancés, por ensayo y error.
La verdad es única. La Ciencia es un instrumento más para alcanzarla, pero sólo en algunos aspectos, por las limitaciones de su propio método. Los seres humanos no nos solemos mover por motivos científicos. Tenemos fuentes de conocimiento muy variadas. Admitimos la mayor parte de la información que recibimos simplemente porque nos fiamos de la veracidad del informador. A veces (bastantes) nos engañan, pero la verdad acaba saliendo siempre a flote.

     A mí me da la impresión de que el conocimiento en general se va a seguir expandiendo de una forma acelerada y, salvo una catástrofe humana o natural que nos suma en una nueva Edad Media, el siglo XXI va a ser mucho más productivo que el XX.

     Tienes más fe en la Ciencia que los científicos, que vamos con pies de plomo y miramos el presente y el futuro con escepticismo. Otra cosa es que lo intentemos vender como la panacea, porque de algo tenemos que vivir. Si David McKay no hubiese aventurado su teoría sobre el origen biológico de los nódulos del meteorito ALH84001, se habría recortado mucho más el presupuesto de la NASA. Lo mismo ocurre en todos los campos de la Ciencia: se avanza a tientas, a pesar de que se hinchan informes y publicaciones para seguir cobrando.

     Si alguien me castiga por mis actos, me castigarían por algo que pasó porque Dios quiso.

     Eso es fatalismo. Si así fuese, seríamos autómatas, o peleles, y no lo somos. Podemos ser esclavos de nuestras propias compulsiones y vicios, pero no de Dios.

     En términos de salvación o condenación, a los condenados los creó a sabiendas de su perdición, sin que quepa  otra posibilidad.

     Eso no te lo crees ni tú. Si fueses ateo, ni siquiera se te ocurriría plantearte dudas sobre la justicia o la bondad de Dios. Te importaría un pimiento si Dios existe o no, o si otros son creyentes o no. Si a Dios le importásemos un pimiento no habría hecho todo lo que ha hecho por nosotros. Es más, probablemente, ni existiríamos.

     Otra pega de la religión es que es difícil para un observador imparcial elegir la correcta, existiendo una muy alta probabilidad de que la correcta sea la de los padres de uno o la de la sociedad en la que vive. Si de elegir la correcta depende la salvación de uno, se condena a priori a la mayor parte de la humanidad, sea cual sea la correcta.

     Nadie es imparcial cuando se juega la vida eterna que, por otro lado, es un regalo de Dios que nadie merece. Es Dios el que elige; al hombre sólo le toca corresponder. Es Dios el que llama a la existencia. A unos da más y a otros menos, pero sólo Él puede juzgar. Si nosotros no tenemos derecho a juzgar a nadie, menos a Dios.

     La naturaleza no es un ente personal,

     Dios sí, y en eso nos asemejamos a Dios, en que nos podemos relacionar con otras personas, incluso con Dios.

     Somos inteligentes porque tenemos cerebro.

     Ni es una condición necesaria ni suficiente. Los ángeles no tienen cerebro. Dios Padre no tiene cerebro. Los caballos lo tienen más grande que el nuestro y son bastante estúpidos. Bien mirado, el cerebro es tan necesario para pensar como el corazón o el hígado. Somos de una pieza.

     La ciencia, la curiosidad, suponen para mí un cierto alivio. En ellas reconozco el origen de la religión.

     Si eres curioso, prueba a hacer oración, a tientas, como los del SETI: "¿Hay alguien que escuche?"
¿Por qué te escondes para mí, Dios de los cristianos? ¿Por qué no tengo fe?
En cuanto al origen de la religión, quizá la mejor explicación la dio S. Agustín, al escribir en sus Confesiones: Dios nos hizo para sí y nuestro corazón está inquieto hasta que descansa en Él.

     Aparte de todo esto, me gustaría que me dijeras las razones por las que una persona llega a ser ateo,

     Razonadas sinrazones serán...
Me es difícil ponerme en la piel de un ateo, si nunca lo he sido. Agnóstico, indiferente, o más bien fresco, puede, pero ateo no. La libertad humana se demuestra principalmente en esa opción fundamental: amar a Dios hasta el propio desprecio, o amarse a uno mismo hasta el desprecio de Dios. (S. Agustín).
Algunos intelectuales ateos afirmaban haber matado a Dios. Pensaban haberlo proscrito de su alma. Pero Dios no se olvida de nadie, aunque vivan de espaldas a Dios.
La mayoría, lo confiesen o no, tienen algún problema personal con Dios. Un problema de bragueta, por lo general. Es increíble lo que llega a cegar la testosterona. Ya se sabe: se empieza transigiendo, y se acaba intentando demostrar que lo blanco es negro, o que lo malo es bueno, o, incluso, atacando a los que pacíficamente intentan vivir como Dios manda.

     Por mi parte, haré lo propio sobre ser religioso. Añade lo que gustes y escoge la tuya:

     Aunque no soy amigo de polemizar, entraré al trapo. Preferiría comentar tus propios puntos de vista, en lugar de los tópicos del ateísmo materialista más rancio.

     Curiosidad: la religión no te deja sin respuestas, especialmente las más transcendentales.

     Perdona que te sea tan sincero, pero se nota que tienes poca formación religiosa: si te hablo de misterios... ¿dirás que soy oscurantista?

     Revelación: lo sabes porque hay un sentido distinto de los sentidos normales que te hace evidente la existencia de Dios.

     La revelación es iniciativa de Dios. La fe no es anormal, es sobrenatural, un don de Dios gratuito que no suple la naturaleza humana, sino que la eleva para que sea capaz de conocer y amar a Dios mismo.

     Autoridad: una fuerza poderosa. Muchas veces, el ir en contra de ella se toma como traición.

     ¿Confundes autoridad con tiranía? Cristo es rey porque es la Verdad, y sólo la verdad es capaz de hacernos verdaderamente libres.

     Conformidad: no crees en ella, te sirves de ella para tus intereses. Lamentablemente este caso se ha repetido con excesiva frecuencia y a él debemos los ejemplos más despreciables de opresión del cuerpo y de la mente, precisamente porque se hace en nombre del amor y los sentimientos que podemos llamar solidarios.

     Esa actitud es mezquina, impropia de un cristiano. El cristianismo es una llamada a la santidad: "Sed santos, porque vuestro Padre que está en los cielos es santo". La religión no es un opio de la conciencia, ni es cuestión sólo ni principalmente de sentimientos.

     Alivio ante la muerte: desde luego, el saberte eterno es un gran alivio que te da la religión.

     Más bien al contrario. El perfecto materialista se suicida en cuanto está deprimido, quizá después de pegarle un par de tiros a su ex-querida. Total: está convencido de que no tiene que dar cuentas a nadie.
Sólo sienten alivio ante la muerte los santos, que confían en la misericordia del Padre. ¡Y Dios es tan misericordioso! Se conforma con la aceptación humilde de la pobreza (culpa, ignorancia, dolor). ¿Sabes lo que Cristo dijo al buen ladrón?

     A mí también me gustaría ser inmortal, pero pienso que es preferible aceptar que no lo eres a vivir engañado.

     Viven engañados los que viven como si no hubiese juicio ni justicia divina.

     Carl Sagan decía que no veía ninguna evidencia de que ese deseo no fuera algo más que eso, un deseo humano.

     San Carl Sagan... El perfecto materialista. Ese era un visionario que no veía más allá de sus propias narices.
 
 
 

"Un doble crimen ha cometido mi pueblo:
abandonarme a mí, fuente de agua viva,
y excavarse cisternas agrietadas,
que no pueden retener el agua...
Maldito el que pone su confianza en el hombre...
será como cardo en un campo seco".


Te escucho.
Si puedo, te daré un consejo.
En cualquier caso, rezaré por ti.

Escríbeme.



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