Aprendiendo a querer


El Espíritu sopla donde quiere

"Yes, there are two paths you can go by.
But in the long run there's still time
to change the road you're on.
"

Stairway to Heaven
Led Zeppelin

Ascensor al Cielo


    Hace tiempo que no escribes nada. ¿Pasa algo?

    Han pasado... muchas cosas. Algunas me incitaban a anotar una idea en un pedazo de papel, para más adelante. Pero luego faltaba tiempo, o inspiración, y no se materializaba en ninguna página que pudiera hacerte llegar.
Últimamente, la voz interior me urgía, imperiosa:      Escribe.
Y, por fin, me he sentado a escribir, de nuevo.
Mientras lo intento, un perro ladra como loco, afuera, en la calle. Y pienso:     Parece como si al demonio no le gustase nada lo que estoy haciendo...

Vivo en el piso 13º de un bloque de apartamentos. Según se cuente      planta baja, entresuelo, primero...     , es el 15º.
Al principio me daba un poco de vértigo asomarme al balcón, pero me he ido acostumbrando.
A veces, en broma, comentamos:     ¡Qué alto hemos caído!

La velocidad no es una de las virtudes del ascensor. Exagerando un poco, se podría decir que pasamos en él parte de nuestras vidas. Está programado para detenerse en todos los pisos donde alguien haya pulsado el botón de llamada. En horas punta, cuando todos tienen prisa, parece un tranvía abarrotado.
Se abren las puertas, se cruzan miradas...
Un viajero sonríe, otro murmura:     Lleno.
Los que esperan en el rellano no pueden ocultar la sorpresa. Algunos se quedan boquiabiertos, mientras las puertas se cierran de nuevo.

En las horas crepusculares, más tranquilas, es frecuente coincidir con algún vecino que saca el perro a pasear... ¿o, más bien, con un perro que saca a pasear al dueño?
Creo que conozco mejor a los perros que a los vecinos. Unos chuchos son tímidos, otros extrovertidos, escandalosos... cada uno tiene su personalidad. Son capaces de convertir un extraño en un amigo para toda la vida en cuestión de segundos. A los tímidos es mejor no atosigarlos. Con el tiempo, si los respetas, se les pasa el miedo y te van aceptando: un buen día deja de mirarte de reojo, más adelante se acerca y te huele el zapato...
Con los vecinos pasa algo parecido. Después de años de convivencia, la relación con algunos no pasa del saludo protocolario. Con otros, en cambio, crece la confianza, anida la amistad y, un buen día, surge la confidencia y se entabla un breve diálogo de altos vuelos:

    Vosotros, los del trece, vais al cielo en ascensor... ¿Tú crees que existe el Cielo?

    Yo espero alcanzarlo, por la misericordia de Dios.
¿Sabes qué pienso? que cuando Jesucristo estaba a punto de morir en la cruz, uno de los que estaban crucificados con Él reaccionó de una manera asombrosa: reconoció que merecía ser castigado y que Jesús padecía siendo inocente y Señor de Cielo y Tierra. Arrepentido, le dijo:     Acuérdate de mí cuando llegues a tu reino.
Y Jesús le respondió:     Te aseguro que hoy estarás conmigo en el Paraíso.
Ambos murieron y fueron sepultados pero, de algún modo misterioso, ¡estaban ya en el Paraíso!

    No sabemos nada...

    Nada de nada.
En esta vida todo parece acabar con la muerte. Es la última y definitiva lección de humildad.
Quien pretenda explicar ese misterio aún lo oscurecerá más. ¿De qué sirve querer explicarlo todo?

    Eso pienso yo. Bueno, me bajo... Hasta otra.

    Hasta otra.

    "Nolite timere pusillus grex quia complacuit Patri vestro dare vobis regnum."
    "No temáis, pequeño rebaño, porque a vuestro Padre le ha dado la gana daros el Reino."

Lucas 12, 32


 

Don de Dios

      Leí lo que escribiste sobre la voz interior y debo decirte "gracias"; había llegado a pensar que estoy completamente loca. Soy cristiano evangélica y aunque los pentecostales estén acostumbrados a lidiar con milagros y dones espirituales, por alguna extraña razón que aún no logro entender, nadie puede creer que mi relación con Dios sea tan fluida; pero lo es...

      ¡Cuánto me alegra encontrar un alma amiga!
¡Más que si recuperase un familiar perdido!
Demos gracias a Dios, porque regala sus dones a quien quiere, para que nadie pueda pensar que merece lo que ha recibido.
Dios tiene pocos amigos en este mundo, y nos ha escogido. No le vuelvas la espalda nunca. Trátale asiduamente. Dale gracias por todo.
Y no te esfuerces en que otros entiendan los caminos de Dios, pues son misteriosos. ¡Si conocieran el Don de Dios!
Procura que los dones del Espíritu den fruto en ti. Somos sal y luz del mundo. No podemos vivir para nosotros solos.

     Creo que a algunos pastores les cuesta creer que Dios te haga caso si no has estudiado en algún seminario teológico.

     Déjalos. Son guías ciegos. Sin vida interior no pueden dar buen fruto.
¡Ah, Santa Teresa...! Al morir, de lo que más se alegraba era de estar en la Iglesia Católica, a pesar de haber sido perseguida por la Inquisición. Fue acusada de herejía y hoy es doctora de la Iglesia. Y ahí tienes a Francisca Javiera del Valle, la autora del "Decenario al Espíritu Santo", que era costurera, y a tantas mujeres que fueron minusvaloradas por los sabios y entendidos de su tiempo y que fueron elegidas de Dios.

     Si otro cristiano tratase de quitarme la certeza de mi relación con Dios en un mundo que cada vez se pudre más en vanidad y materialismo, probablemente me arrebataría mi única razón para vivir.

       No tengas miedo. Relee lo que san Pablo dice a los romanos en el capítulo 8 de su carta: 38 Estoy seguro de que nada podrá separarnos del amor de Dios: ni la vida, ni la muerte, ni los ángeles, ni los espíritus, ni lo presente, ni lo futuro,39 ni los poderes del cielo, ni los del infierno, ni nada de lo creado por Dios. ¡Nada, absolutamente nada, podrá separarnos del amor que Dios nos ha mostrado por medio de nuestro Señor Jesucristo!

     A veces se necesitan palabras de aliento de otro ser humano. Que Dios te bendiga.

      Dios nos bendice. Para Él toda la gloria. Todo lo bueno viene de Dios. No somos más que instrumentos.

     En un mundo en que todos dicen ser cristianos, es difícil explicar por qué una puede llegar a sentirse tan sola.

      Porque no nos esforzamos en mantenernos en presencia de Dios, en ser almas contemplativas, con los pies en la Tierra, pero con el corazón en el Cielo.
Buscad las cosas de arriba... Saboreadlas... Nuestra vida está escondida con Cristo en Dios, decía san Pablo (Col, 3, 1-3).

     A veces me cuesta entender que no todo el que dice:      Señor, Señor      lo conoce realmente.

      Por los frutos nos conocerán. No podemos juzgar a los demás, porque todos tenemos defectos.
Hasta el más miserable es digno de compasión. Yo diría que más, pues es mayor su desgracia.
He de confesarte que me veo muy miserable, pero que esa certeza no me deprime, pues espero que Dios se compadezca de mí, y que me enseñe a ser compasivo:       Tendré misericordia de quien tenga misericordia, y tendré compasión de quien tenga compasión (Ex. 33, 19).

Cuando anida en un corazón el amor de Dios, nadie le resulta extraño.
Los soberbios y los hipócritas nos pueden resultar especialmente insoportables, pero nunca indiferentes.



    "Mis ovejas oyen mi voz,
y yo las conozco, y me siguen.
Yo les doy vida eterna y no perecerán para siempre,
ni nadie las arrebatará de mi mano
."

Juan 10, 27-30


Aprendiendo a querer

Antonio Parra
Julio, 2007