Ramon Casas i Carbó
La càrrega



Catalogación:
Título: La Càrrega (La Carga) ó también, Barcelona 1902

Fecha: 1899-1903

Material: Óleo sobre tela 

Dimensiones: 2.98 x 4.705 m 

Localización: Museo de Olot (Girona)

Aspectos técnicos y estilísticos:

Ramón Casas, es un pintor formado tempranamente en Francia, donde su posición económica le permitío viajar a menudo desde los 15 años. Allí recibe sus primeras influencias del academicismo francés y comienza a tomar contacto con el mundo del retrato y por la pintura con un cierto carácter costumbrista, que completará en España, con su admiración por la pintura del Siglo del Oro.

Su época más productiva la podemos concretar entre 1880 y 1910, entre exposiciones en París, y en la Sala Parés, dedicadas sobre todo al retrato. Ramón Casas acaba haciendo pintura amable para los buenos burgueses, a quienes hay que saber agradar para vender más fácil las pinturas. Intenta en estas obras alajarse de los tintes dramáticos de la pintura modernista convencional, para adoptar composiciones con toda la fuerza y vitalidad de la simplicidad, el color y el dibujo. Con sus compañeros de Els Quatre Gats, sigue vinculado al movimiento modernista internacional pero también recibe influencias de las composiciones de Toulouse-Lautrec, sobre todo de sus obras gráficas, como las ilustraciones de carteles para obras de teatro y “music-hall”.

Su vinculación con este arte gráfico tendrá gran repercusión, en la publicidad de su tiempo, que le utilizará para crear carteles de enorme éxito, como el de los cigarrillos París, o la más conocida imagen de la etiqueta de Anís del Mono.

Ramón Casas es un atento cronista de la vida barcelonesa de su tiempo. Sus retratos al carboncillo (más de doscientos) son un documento impresionante de la estética modernista. Su técnica es de una rapidez y pureza de líneas impresionante. De sus viajes frecuentes a París recoge muchas influencias tanto impresionistas como de los paisajistas que disfrutan pintando al aire libre. En Barcelona fue uno de los grandes animadores de la vida artística; frecuentaba la cervecería “Els Quatre Gats” y colaboró en la elevación de Sitges a centro cultural,  artístico y turístico de primer orden junto al tambien pintor Rusinyol. Fue un innovador de la estética de los carteles con modelos que aún siguen siendo copiados. Impulsó la creación de revistas como Pèl & Ploma. Su producción gráfica fue muy importante para la formación juvenil de Pablo Picasso, sobre todo durante su estancia en Barcelona.

Análisis de la obra:
Esta obra fue expuesta por primera vez en París, como era habitual en Casas, en el Salon del Campo de Marte (Champ de Mars), después de haber sido rechazada con motivo de la Exposición Universal de París de 1900. Más tarde Casas la seguiría exponiendo en diversos salones y muestras como por ejemplo en la Exposición Nacional de Madrid del año 1904 donde obtuvo un primer premio. 

Casas es un pintor que trabaja además del retrato, los cuadros de masas de una forma muy original, hasta el punto que le podemos considerar como un pintor-cronista de su época. De esta faceta nos ha dejado varias obras muy originales, como La Procesión de Santa Maria del Mar, El Garrote Vil, el Embarque de soldados a Cuba, escenas de la Semana Trágica, y la misma Carga, que analizamos. El análisis de Casas sobre la pintura cotidiana, no tiene el mismo sentido que la pintura historicista, tan de moda en la España del último cuarto del siglo XIX.

 

En un cuadro de grandes dimensiones, nos situa delante de un acontecimiento histórico, aunque el cuadro esté pintado antes de lo que la escena quiere representar, (La huelga que tuvo lugar en Barcelona en Febrero de 1902). Ramón Casas nos ofrece una visión de la zona portuaria de Barcelona, con la silueta de Santa Maria del Mar, en el centro de la composición, dominando a un gran grupo de huelguistas que son dispersados por la Guardia Civil. El pintor juega con los espacios llenos y los espacios vacíos igual que en La Procesión y en el Garrote Vil, creando un ambiente revuelto, con gente atropellada, humo y polvo, cielos ensombrecidos, y fondo urbano difuminado, para crear una atmósfera dramática.

La escena principal, que nos llama enseguida la atención, es la del Guardia a caballo que arrolla a uno de los obreros, acto más dramatizado, si cabe, por el hueco enorme que se ha producido en el centro de la escena, a consecuencia de la violenta carga de los agentes.  El caballo parece frenarse ante la caída del manifestante, representado en un violento escorzo mientras rueda por el suelo.  Así el centro de interés, aparece desplazado hacia el lado derecho de la composición. A pesar de esta disposición un tanto llamativa, la obra guarda un gran equilibrio compositivo, que Casas completa con un perfecto estudio del tema, y su ya acostumbrada maestría en el manejo de la pintura muy suelta, con pinceladas amplias y gran dominio de los tonos de color, en unas figuras que observadas de cerca se reducen grandes manchas.

Ramón Casas. "Garrote vil" (1894)

En resumen la obra de Ramón Casas incorpora aspectos impresionistas en cuanto al tratamiento del color, y al mismo tiempo se deja llevar por las corrientes simbolistas, noucentistas y modernistas, al gusto en la Cataluña de final del siglo XIX, de la que él, junto a Santiago Rusiñol y Enric Clarassó, son los máximos exponentes artísticos, en el campo de las artes decorativas y la pintura. Son un grupo de carácter catalanista y progresista, que en su dia, fueron incluso tachados de decadentes, pero que en su autenticidad se preocupan de la búsqueda de la belleza y el refinamiento. El Modernismo catalán está impregnado de un fuerte naturalismo, pero también significa una fuerte reacción contra la pintura académica, basada en la historia y en el costumbrismo.


Más información
Página de Ramón Casas

Ramon Casas i Carbó
 
Pàgines de batxillerat humanístic i artístic. Javier Arrimada 2010