Presentación de la traducción al catalán de la Acción Humana de Ludwig von Mises (Barcelona, 14 de junio de 2010)

El lunes 14 de junio tuvo lugar en Barcelona, en el auditorio de Fomento del Trabajo, la presentación de la traducción al catalán de la gran obra de Ludwig von Mises “La acción humana. Tratado de economía”.

La primera edición en inglés de La Acción Humana fue publicada en 1949 por Yale University Press. Diez años años antes se había publicado en alemán Nationalökonomie, el primer tratado sistemático de economía que escribió Mises, y que pasó totalmente inadvertido entre el mundo académico, debido a la segunda guerra mundial y, también, al propio idioma en el que fue escrito.
En 1934, poco tiempo después del ascenso del nacionalsocialismo al poder, Mises había abandonado Viena para aceptar una plaza de profesor en el “Institut Universitaire de Hautes Études Internationales” en Ginebra (Suiza), donde permanecería hasta 1940, cuando la ocupación nazi le obligaría a emigrar a los Estados Unidos. Una vez establecido en Nueva York, Mises revisó por completo y reescribió Nationalökonomie. El resultado fue La Acción Humana. La obra cumbre de Mises, 61 años después, ha sido traducida a 14 lenguas. La más reciente es la traducción al catalán, presentada en Barcelona el pasado 14 de junio.

Juan Rosell, presidente de Fomento del Trabajo, presidió el acto, en el que intervinieron Xavier Mallafré, director general de Grup 62, la compañía responsable de la edición catalana; Juan Torras, presidente del Instituto von Mises de Barcelona; Juan María Nin, director general de La Caixa; y el catedrático de economía política de la Universidad Rey Juan Carlos y gran especialista en la obra de Mises, Jesús Huerta de Soto.

El editor fue el primero en tomar la palabra y reflexionó sobre la oportunidad, la conveniencia y el riesgo que conlleva el lanzamiento de esta edición, existiendo una en castellano desde 1960.

Después tomó la palabra Juan Torras, presidente del Instituto von Mises de la ciudad condal, que habló sobre los primeros seguidores de Mises en España y de una de las aportaciones seminales del gran economista austríaco, la imposibilidad del cálculo económico en una economía socialista. Presentó al siguiente ponente, el profesor Jesús Huerta de Soto Ballester, como uno de los mayores, quizás el mayor exponente de la Escuela Austríaca en el mundo actual.

El catedrático de Economía Política hizo una defensa apasionada de Mises y de su obra. Calificó de histórico el día en que presentaba la edición catalana de La Acción Humana, libro que considera la Biblia de todo economista liberal. No en vano es el manual que utilizan sus alumnos en la Universidad Rey Juan Carlos, hecho que causa impacto entre una comunidad académica que suele utilizar unos manuales positivistas de origen mayoritariamente anglosajón y que emplean una metodología equivocada y basada en la ingeniería social.

El profesor Huerta de Soto recordó en su discurso que Mises había nacido y vivido en el imperio austrohúngaro, donde convivieron pacíficamente más de veinte comunidades étnicas y lingüísticas bajo un sistema de libre mercado. Mises se autodenominaba nacionalista-liberal. El nacionalismo sólo es nocivo si se desarrolla bajo la égida del estatismo y al margen de los principios del libre comercio.

El profesor Huerta de Soto recordó también que la primera edición española de La Acción Humana apareció gracias a la Fundación Ignacio Villalonga y al esfuerzo del traductor Joaquín Reig Albiol, a comienzos de 1960. Frente al análisis del equilibrio típico de los economistas neoclásicos, ya sean keynesianos o de la escuela de Chicago, Mises subraya los procesos dinámicos de mercado impulsados por la capacidad creativa y coordinadora de la función empresarial. Este enfoque es mucho más realista y permite deducir la imposibilidad de un orden social basado en la planificación y el socialismo.

Otro punto que destacó Huerta de Soto es la vigencia del tratado de economía de Mises. En plena crisis financiera internacional consecuencia de la expansión crediticia orquestada por los bancos centrales, es fundamental tener una buena teoría como la de Mises, quien ya en los años veinte había advertido de las nefastas consecuencias de las expansiones crediticias sin base de ahorro real. El ciclo surge porque los empresarios, engañados con tipos de interés artificialmente bajos, invierten en proyectos que no son los que desean los consumidores. Las crisis económicas son inevitables una vez se ha desencadenado la expansión monetaria y crediticia; sólo se podrán evitar con un rediseño institucional del sector financiero. Se requiere libertad de elección de moneda y privatización del dinero, eliminación del banco central y derogación de las leyes de curso forzoso, restablecimiento de un sistema de banca libre con un coeficiente de caja del 100 por 100 para los depósitos a la vista.
El reivindicar una vez más un sistema monetario basado en el patrón oro y con coeficiente bancario del 100% para los depósitos a la vista, motivó un gesto escéptico por parte del director general de La Caixa, Juan María Nin.

Precisamente fue Juan María Nin quien clausuró el acto. ¿Y ahora qué digo yo? se preguntó después del exhaustivo, detallado y apasionado discurso de Huerta de Soto, que fue muy aplaudido por el público que llenaba la sala. Nin reflexionó sobre la importancia que tiene para los alumnos el leer libros, y recordó cómo un antiguo profesor suyo les recomendaba encarecidamente la lectura para que “se les quedara algo”, ni que sea el título de la obra al acariciar el lomo de la misma.

En definitiva, La Acción Humana ya está disponible en catalán; un libro que no puede faltar en la biblioteca de ningún buen economista (liberal o no). Como decía el propio Mises, el saber acumulado por la ciencia económica forma parte fundamental de la civilización: es el fundamento sobre el que se han edificado el moderno industrialismo y todos los triunfos morales, intelectuales, técnicos y terapéuticos alcanzados por el hombre a lo largo de las últimas centurias. El género humano decidirá si quiere hacer uso adecuado del inapreciable tesoro de conocimientos que este acervo supone o si, por el contrario, prefiere no utilizarlo.

José Antonio Corral
Jordi Franch Parella