La energía solar presenta dos características que la diferencian de las fuentes energéticas convencionales:
Dispersión:
su densidad apenas alcanza 1 kW/m2, muy por debajo de otras densidades
energéticas, lo que hace necesarias grandes superficies de captación
o sistemas de concentración de los rayos solares.
Intermitencia:
hace necesario el uso de sistemas de almacenamiento de la energía
captada. Ello lleva a un replanteamiento en el aprovechamiento de la energía,
totalmente distinto al clásico, lo que requiere un gran esfuerzo
de desarrollo. Así pues, el primer paso para el aprovechamiento
de la energía solar es su captación, aspecto dentro del que
se pueden distinguir dos tipos de sistemas:
Pasivos:
no necesitan ningún dispositivo para captar la energía solar,
cuyo aprovechamiento se logra aplicando distintos elementos arquitectónicos
Activos:
captan la radiación solar por medio de un elemento de determinadas
características, llamado "colector"; según sea éste
se puede llevar a cabo una conversión térmica (a baja, media
o alta temperatura), aprovechando el calor contenido en la radiación
solar, o bien una conversión eléctrica, aprovechando la energía
luminosa de la radiación solar para generar directamente energía
eléctrica por medio del llamado "efecto fotovoltáico"
Colector solar SOLAHART
300J con circuito cerrado.
Clasificación de los sistema de captación
El colector es una superficie,
que expuesta a la radiación solar, permite absorber su calor y transmitirlo
a un fluido.
Existen tres técnicas diferentes entre sí en
función de la temperatura que puede alcanzar la superficie captadora.
De esta manera, los podemos clasificar como:
Baja
temperatura: captación directa, la temperatura del fluido es
por debajo del punto de ebullición.
Media
temperatura: captación de bajo índice de concentración,
la temperatura del fluido es más elevada de 100ºC.
Alta
temperatura: captación de alto índice de concentración,
la temperatura del fluido es más elevada de 300ºC
BAJA temperatura:
Generalmente el aprovechamiento térmico a baja temperatura se realiza a través de colectores planos, cuya característica común es que no tienen poder de concentración, es decir, la relación entre la superficie externa del colector y la superficie captadora, la interior, es prácticamente la unidad.
Consta
de los siguientes elementos:
Cubierta exterior. Generalmente formada por una lámina de
cristal, lo más transparente posible, aunque a veces es sustituida
por algún tipo de plástico (Tedlar, EVA). Se pueden encontrar
con varias capas de cristales, evitando así pérdidas de calor,
pero encareciendo el colector. Es la parte más propensa a la rotura,
ya sea por agresiones externas o por efecto de la dilatación del
propio cristal.
Placa absorbente. Es prácticamente una placa plana pintada
de negro, con objeto de aumentar su poder de absorción y disminuir
la reflexión. Podemos encontrar los tubos para el fluido caloportador,
que van soldados a la placa o sencillamente son parte de ella.
Aislamiento. Es el recubrimiento en todos los lados del panel,
excepto en la parte acristalada, que evita pérdidas térmicas.
El material es cualquier tipo de aislante (fibra de vidrio, poliuretano)
y el grosor depende de la aplicación, lugar, tipo de aislante.
Caja exterior. Es la que alberga a todos los componentes (cubierta
exterior, placa absorbente, aislamiento) generalmente de aluminio, por
su poco peso y aguante a la corrosión.
Existen
otro tipo de colectores planos que no responden a esta descripción:
Colectores para piscinas. Son colectores sin cubierta, sin aislante
y sin caja, solamente están compuestos por la placa absorbente,
que por lo general es de un material plástico. Aumenta la temperatura
del agua entre 2 – 5ºC, y solo funciona en épocas veraniegas
ya que tiene grandes pérdidas, por eso se usa para calentar el agua
de las piscinas.
Colectores de vacío. Están compuestos de una doble
cubierta envolvente, herméticamente cerrada, en la cual se ha hecho
el vacío, de esta forma las pérdidas por convección
se reducen considerablemente. El problema de estos colectores es el precio
elevado y la pérdida de vacío con el tiempo.
MEDIA y ALTA temperatura:
Para la obtención de elevadas temperaturas es necesario recurrir a colectores especiales, ya que con los planos es imposible, estos colectores son los colectores de concentración, cuya filosofía no es más que aumentar la radiación por unidad de superficie. Hay varias formas y sistemas, pero la parte común a todos es que necesitan orientación.
Estos se componen de las siguientes partes:
Superficie
reflectora. Constituido por una lámina reflectora, generalmente
Mylar, Hostaflon u otro material plástico de características
similares, también pueden ser de vidrio con recubrimiento de espejo,
estos no muy habituales, ya que tienen que soportar las inclemencias del
medio y es difícil la fabricación de forma curvada. En todos
los casos deben de tener una reflectividad superior al 95%.
Superficie
absorbente. Dependen de la forma de la superficie reflectora, pero generalmente
son de forma cilíndrica o plana pintadas de negro o recubiertas
con una capa de material selectivo.
Cubierta
protectora. Generalmente protegen a la superficie absorbente y casi nunca
a la superficie reflectora, el aislante habitual es el vacío.
Sistema
de seguimiento. Puede ser de varios tipos:
- De movimiento longitudinal, de un eje, con movimiento de Este a Oeste.
- De movimiento latitudinal, de un eje, con movimiento de Norte a Sur.
- De movimiento completo, de dos ejes, puede orientarse en todas direcciones.
Podemos
destacar de estos que la parte más importante es la forma de la
superficie reflectora y que pueden ser:
- Concentradores cilindro-parabólicos compuestos (CPC) constituidos
por dos ramas de parábola, cuyos focos se encuentran en el
extremo de la rama opuesta.
- CPC sin truncar, son los que las ramas de parábola son simétricas,
cubriendo ángulos iguales a ambos lados de la superficie reflectora.
- CPC truncados, son los que las ramas de parábola no son simétricas,
teniendo truncadas una o ambas ramas.
- Asimétricos, como indica su nombre, no poseen simetría
respecto del eje del concentrador.
- Lentes de fresnel, que son una derivación de las lentes plano-convexas
Lentes de fresnel
Paraboloidales, que son los formados por una paraboloide,dotados de una
geometría muy compleja de fabricar, llegando a tener una razón
de concentración superior a 2000
Deformación elástica de membrana, formada por membranas metalizadas,montadas
sobre una estructura, parecida a la de un tambor, adquiriendo una forma
parecida a una paraboloide cuando son sometidas a una depresión
mediante vacío.