Educación
En primicia dos días antes de la presentación oficial
El creador del proyecto " El ordenador de los 100 dólares" desvela sus detalles en Valencia
. Entre otras innovaciones destaca el diseño de la pantalla, que cuesta un tercio de lo que se paga por una tradicional
. Los "portátiles para niños" comenzarán a fabricarse en julio
. Brasil, Argentina, Uruguay, Libia, Ruanda, Nigeria y Tailandia son algunos de los países interesados en el programa
 
El creador del proyecto de "El ordenador de 100 dólares", Michail Bletsas, observa un modelo de este portátil tras la conferencia en Valencia
Michail Bletsas, durante la conferencia que ha ofrecido en el encuentro "Powerful Ideas Summit - Ideas para el futuro, ahora", celebrado en la Universidad Politécnica de Valencia
Ordenador de 100 dólares
Efe / Manuel Bruque El creador del proyecto de "El ordenador de 100 dólares", Michail Bletsas, observa un modelo de este portátil tras la conferencia en Valencia
LA VANGUARDIA 24/01/2007 | Actualizada a las 17:23h
Valencia. (EUROPA PRESS).- El creador del proyecto 'El ordenador de 100 dólares' -que prevé acercar la tecnología a los niños de los países del Tercer Mundo-, Michail Bletsas reivindicó hoy en Valencia, donde adelantó en primicia los detalles de esta iniciativa que presentará oficialmente dentro de dos días en Davos (Suiza), la necesidad de que exista una "igualdad de oportunidades" para la población infantil de los estados subdesarrollados y, para ello, apostó por que "integrar los ordenadores en todas las actividades de diarias de su vida, incluso fuera de la escuela".

Bletsas, que adelantó hoy en primicia este proyecto dentro del encuentro 'Powerful Ideas Summit-Ideas para el futuro, Ahora', que se celebra desde hoy y hasta el viernes 26 de enero en la Universidad Politécnica de Valencia (UPV), mostró su ordenador "de cien dólares", una herramienta de "muy bajo coste", que "se puede cargar con energía humana" y que "se venderá directamente a los gobiernos de los países no desarrollados para que estos los distribuyan a los niños", explicó.

El proyecto "está pensado teniendo en cuenta el entorno real donde viven los niños de los países en vías de desarrollo, donde no hay electricidad, se carece de conexión a internet y no tienen recursos económicos", indicó Bletsas. Limitaciones por las cuales, "este portátil tardó alrededor de dos años en crearse", concretó.

Superar estas dificultades "fue más un problema de convencer a los fabricantes que tecnológico", afirmó. Para rebajar el precio del aparato -que oscilará entre los 100 y los 140 dólares-, lo primero fue dar un "enfoque no comercial", puesto que el 15 por ciento del coste de un ordenador es por marketing, distribución y ganancia.

Por ello, creó una asociación sin ánimo de lucro que contacta directamente con los gobiernos para conseguir que compren "a gran escala" y que no vendan los ordenadores sino que los distribuyan entre los niños de su país, matizó.

En este sentido, comentó que actualmente tienen "entre cinco y diez millones de unidades para entregar cuya fabricación comenzó en julio" y que los "principales países receptores que ya han expresado su interés" en el proyecto son Brasil, Argentina, Uruguay, Libia, Ruanda, Nigeria y Tailandia, detalló.

En relación a las cuestiones tecnológicas, señaló el diseño de una pantalla "innovadora que cuesta un tercio de lo que se paga por una tradicional, consume menos energía, tiene mejor visibilidad, tanto en interiores como en exteriores, e incorpora un sistema para refrescarse", señaló.

Asimismo, subrayó que "el portátil puede recargarse con energía humana", a través de un sistema de cuerda similar a un 'yo-yo', donde se estira desde un punto la cuerda al igual que se hace para arrancar cualquier motor.

Al respecto, dijo que se está trabajando para encontrar una fórmula alternativa para que la energía humana sea auxiliar y no el modo de carga principal, pero matizó que "no se trata de vender generadores, porque muchos lugares no tienen energía y no queremos crear desigualdades, ni encarecer el producto, ni dedicarnos al negocio de la energía", incidió. Añadió que "medio billón de niños en el mundo no disponen de electricidad, por lo que no es un buena idea entregarles un ordenador que requiera mucha energía".

El portátil necesita una carga de unos 23 watios por hora y, "con un caudal de energía de 20 watios por hora, se tardaría dos horas en cargar su batería desde cero, indicó. El consumo depende también del uso que se haga del ordenador, puesto que leer, ver vídeo o enviar e-mails, son actividades que consumen distintos niveles de energía, explicó. Además, "uno de los aspectos más innovadores de esta máquina es su capacidad de formación de 'redes de retícula' para regular la conexión con otras máquinas estando apagado y utilizarlo como un router estando la máquina apagada", resaltó.

Plataforma de Innovación
Sobre las aplicaciones, Bletsas apuntó que "tiene todas las que tiene un portátil común" y que para los países donde no hay acceso a Internet "hay gente que ya está pensando en la posibilidad de un abono donde los gobiernos pagarían un dólar por niño al mes, pero hay que ponerse en su lugar". Se quiere que los niños "exploren y creen una relación con la máquina física, que la abracen", dijo. Busca ser "una plataforma de innovación, educar y enseñar que, si tiene éxito, para el 2010 podría estar al precio de 50 dólares", auguró.

El creador del ordenador de 100 dólares remarcó que los fabricantes de ordenadores "no deberían tener problemas con este proyecto, puesto que se dirige a un mercado que ellos no pueden cubrir". Además, según Bletsas "a largo plazo, les estamos creando futuros consumidores y estamos acelerando sus ambiciones en los países en vías de desarrollo, puesto que en 15 o 20 años, estos niños son el potencial de sus clientes", concluyó.

Recopilación Antoni Perulles i Rull; 25-01-2007.