“Concluyda la función del Bruch, se unieron (part d’aquests sometents) para venir sobre Villafranca, se les unieron varios malvados de las cercanías y el día 8 por la mañana se nos dio el aviso que en el lugar de la Granada estaban prontos a entrar  800 hombres armados, con el ánimo decidido de matar varias personas, cuya lista enseñaban (…) eran las 4 de la tarde dadas (…) me dan la noticia que el somatén se hallaba delante del convento de Capuchinos (…). No havía yo bien llegado a la esquina de casa el confitero Gras, quando me hallo rodeado de una multitud desordenada de gentes que con gritos fieros, continuados tiros y amenazas de muerte horrorisaban a todos sin distinción de débiles y fuertes (…).

Una partida se dirigió al campanario a tocar a somatén. Otra en casa el Governador (…) forzaron las puertas, y hallando la Gobernadora al Jardín, la fusilaron así que la vieron; quedó allí mismo tendida, y con ella dos perritos falderos. Inmediatamente encienden una hoguera en medio de la calle y arrojan trastes, ropas, alajas y toda la Secretaría; lo que no fue quemado fue robado, y en un instante queda la casa enteramente saqueada. Estos y otros se dirigen a casa Garrigó lo arrastran por la casa le matan, roban, queman ropas, trastes y quanto hay en la casa, lo dexan enteramente nudo, muerto le dan mil cuchilladas y lo echan a la hoguera (…). Buscan al Governador lo hallan en casa Doña Josefa Casanovas lo toman del brazo, es conducido por el que los capitanea, y en la misma calle delante la tienda de mi cuñado Juan Batlle fue fusilado inmediatamente”.

 (Testimoni de Lluís Freixas, regidor de l’ajuntament de Vilafranca. Citat a: SIMON ABELLAN, Pere. L’Arboç (1807-1836) segons l’Anton Sans, teixidor de lli, Ajuntament de l’Arboç, 2002, pp. 106-107)