“En efecto no se podrá prescindir de estas necesarias reformas que están en el orden de todo buen Gobierno (…); entre otros parece que debe abolirse la Ley de Toro que prohibe la deduccion de las mejoras hechas en los mayorazgos (…); las ordenanzas de montes y plantios, dejando á sus Dueños el libre y absoluto aprovechamiento de sus maderas. Las Leyes de la Mesta á lo menos modificando sus exorbitantes privilegios de modo que se restituya la libertad al cultivo, sus derechos a la propiedad, y sus fueros a la razon y justicia; las relativas á la agricultura, artes y Comercio interior las quales impiden sus progresos; y las respectivas á Alcabalas, y Tributos ó Rentas Reales generales y provinciales en razon de su administracion y recaudacion por el excesivo numero de empleados, y el excesivo de tributos que hace casi indispensable el desarreglo; sobre lo que se quejan tanto nuestros autores economistas que en esta misma razon apoyan el proyecto de sustituirlos en la unica Contribucion (…)

Establezcase pues la unica contribucion para cuya operación propone el metodo Dn. Miguel Zabala (…) con el exemplar comprobante de haberse verificado efectivamente en este Principado de Cataluña á principio del siglo 18 con el titulo de Catastro”

 (Memorial dels canonges de Lleida de 17 desembre 1809. Archivo del Congreso de los Diputados, Serie General, Leg. 6 n. 21,)

“Quítense las trabas que impiden la libre circulación (...). Destiérrense las tasas y aforos que destruyen el infeliz labrador sin aliviar al habitante de las villas y ciudades (...). Por desgracia, se ha dado siempre una preferencia injusta a la industria urbana sobre la rústica. De aquí han nacido las ordenanzas gremiales, que deben examinarse con mucho cuidado, pues al paso que es útil la conservación de muchas de estas corporaciones, otras deben suprimirse, y todas han de ser de modo que quede libre el ejercicio de las fuerzas corporales y de la industria, que son el único patrimonio de la mayor parte del pueblo (...)

El medio verdadero y único de impedir la extracción del dinero es fomentar la agricultura, la industria y el comercio, que son las fuentes de la pública felicidad”

(Informe del baró de Castellet de 20 novembre 1809. Arxiu de la Corona d’Aragó, Doc. Junta Superior, Caixa 11)