“Si vemos que los enemigos quieren permanecer en ésta (Mataró) según pronostican algunos, nos será preciso ir a Mallorca, desde donde podremos hacerles los embíos con más seguridad, y siendo esta Plaza protegida de los Yngleses se ve con evidencia que en ella tendrá curso el giro de nuestras Américas; los efectos de Cataluña pararán allí porque siempre habrá libre una parte u otra de la Costa de este Principado, y así tendremos igual proporción para hacerles los embíos (…)

Con motivo de haverse apoderado los Enemigos de tantas Plazas en este Principado ocupan mucho de sus alrededores y por lo mismo se va entorpeciendo cada día el curso de sus fabricaciones. A medida que los comerciantes ricos se les disminuyen sus fondos porque tienen que vivir de ellos, y tienen que pagar unas contribuciones enormes, se van disminuyendo también los embíos a América, por cuyas razones no dudamos que en breve se irán aumentando los precios en ésa.

Muchas de las poblaciones más ricas de este Principado se hallan ya constituidas en el mayor apuro”

(Carta de 7 setembre 1811 d’una companyia mercantil establerta a Mataró. Citada a: LLOVET, Joaquim: Cartes a Veracruz. Barcelona, Rafael Dalmau ed., 1974, p. 129)