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Materias aislantes

530. Ebonita

El incremento tan considerable que han tomado las aplicaciones de la gutta-percha y el caoutchouc, de cuyas sustancias se confeccionan hoy multitud de objetos aplicables á las ciencias, á las artes y aún á la economía doméstica, ha hecho pensar á los que á esta industria se dedican, en utilizar los resíduos de las fábricas, y con esta mira han combinado estos resíduos con otras materias, principalmente con el azufre y el carbón, dando por resultado una porción de compuestos que se emplean hoy en cofeccionar juguetes, peines, etc., etc.

Uno de estos compuestos, de preciosas aplicaciones en los aparatos eléctricos por sus condiciones aisladoras y dureza, recibe el nombre de ebonita.

Se compone la ebonita de una mezcla de 5 partes de caoutchouc y de 2 á 3 de azufre, que se hace cocer durante muchas horas á una temperatura de 170º y bajo una presión de 4 á 5 atmósferas. El cuerpo que resulta es negro, muy duro y admite el pulimento por el cual adquiere bastante brillo. Se emplea para mango de las clavijas de contacto, tableros de mesas y sostenes de aparatos telegráficos que se quieran tener bien aislados.

Pero si la ebonita como sustancia aisladora es la primera, no sucede lo mismo respecto á las condiciones que reune para sufrir los cambios de temperatura. La que se deja sentir en la parte meridional de España es tal, que no es posible que la ebonita, al menos tal cual hoy se prepara, deje de sufrir alteración en la superficie, y poniéndose rugosa, permita la adherencia del polvo y la permanencia del agua despues de la lluvia, lo que perjudica notablemente las condiciones del aislador. Como creemos que variando las proporciones de los cuerpos que entran a componer la ebonita, pueden hacerse variar mucho las condiciones físicas de ella, no diremos más respecto á esta sustancia, sino que por hoy, no creemos ventajosa su aplicación para aisladores, en España. Su resistencia á la rotura y su poco peso la hacen á propósito para darle esta aplicación en las líneas militares. Como esta materia retiene menos la nieve que la porcelana, suele aplicársela en algunos sistemas de aisladores como auxiliar para las zonas interiores.
 

531. Vulcanita

La vulcanita es un compuesto análogo al anterior formado por 100 partes de caoutchouc, 45 de azufre y 10 de gutta-percha. Tiene aplicaciones análogas á las de la ebonita, cuyas propiedades posee.
 

532. Vidrio

Sigue á la ebonita, en el orden de sustancias aisladoras, el vidrio. Los vidrios son en general silicatos alcalinos (de potasa o sosa) que se combinan con el de cal, con la alúmina ó con algunos óxidos metálicos, formándose silicatos dobles fusibles que pueden modelarse y trabajarse al soplete. La variación de las proporciones de los componentes y la adición o supresión de algunos de ellos, modifican notablemente el aspecto y valor de los diferentes vidrios. El que mejores condiciones eléctricas tiene, es el flint-glass que es un silicato de potasa y óxido de plomo, en que éste entra en proporciones algo mayores que en la confección del cristal ordinario.

El vidrio o cristal se obtiene fundiendo buenas arenas o cuarzo pulverizado, con carbonatos ó sulfatos alcalinos á los que se unen las demás sustancias básicas.

Los aisladores de vidrio han sido muy empleados y aún se usan en América, pero tienen el inconveniente de su mucha fragilidad y ser sustancia bastante higrométrica, por lo cual ha dejado de emplearse. La superficie que presenta es muy tersa, por lo que el polvo que se le agrega desaparece con la lluvia y el aislador queda lavado.
 

533. Porcelana

Fabrícanse las porcelanas formando pastas de arcillas plásticas y cuarzo, á las que se agrega para obtener clases superiores alguna parte de kaolin. La calidad de las materias que se emplean, la manera de trabajar la pasta y las proporciones en que los componentes entran, da tal variedad á estos productos, que á veces ni los de la misma fábrica y los mismos precios, son comparables en sus resultados. Hacen por regla general los fabricantes que consiguen distinguirse algo en esta industria un secreto impenetrable de los medios que emplean para la elaboración, lo cual no tiene para nosotros más inconvenienteque la dificultad que naturalmente ha de ofrecer el apreciar, por su sola inspección, sus cualidades para el uso que de ella hacemos. Si se tuviese idea fija de su fabricación, podría venirse en conocimiento de su valor como sustancia para la confección de aisladores, según que el medio empleado fuese ó no el más conveniente.

La pasta que se forma con la arcilla y el cuarzo se modela fácilmente, y despues de secos al aire los objetos, se los pasa á un horno donde sufren una primera cocción á una temperatura de 100º del pirómetro de Wedgwood, que dura unas setenta horas.

Las piezas, al salir de este horno, están al estado de bizcocho de porcelana, y deben ser sonoras, porosas, pero de masa homogénea y de poro pequeño si ha de servir para aisladores. El bizcocho de porcelana, recibe el baño o vidriado, y de su calidad y condiciones depende el éxito, que no puede preveerse hasta despues de usado.

Forman en las fábricas el barniz de plomo, borax ú otra materia equivalente, y ha de ser tal, que no debe infiltrarse en la pasta al fundir por la segunda cocción que con él sufre el objeto, ni al enfriarse debe separarse del bizcocho, formando con él cuerpo, tener dureza y corresponder en su calidad a la de éste. Para que el barniz tenga más asimilación con el bizcocho se le agrega cuarzo, feldespato, etc. El barniz se da por inmersión, y las piezas se someten a una nueva cocción, con lo cual se vitrifica.

Preparada así la porcelana, claro es que ha de resultar una sustancia muy conveniente para la confección de aisladores. El vidriado, si es bueno, presenta una superficie tersa que el agua lava fácilmente, la materia ofrece bastante resistencia para los efectos de presión y tracción, su precio no es muy elevado y por lo tanto posee excelentes condiciones para dicho objeto.
 

534. Parafina

Entre los diferentes productos que provienen de la destilación de las maderas, se encuentra un compuesto de hidrógeno y carbono que es la parafina. Esta materia sólida, blanca y brilllante; es inodora, insípida, grasienta al tacto y arde con una llama pura y blanca sin producir olor y sin dejar resíduo. A los 44º funde y destila sin descomponerse. Resiste a la acción de los ácidos y de los álcalis, y ocupa en el orden de mala conductibilidad eléctrica el tercer lugar. Con ella se forman preciosas bujías transparentes. Se comprende fácilmente que no puede ofrecer resistencia para confeccionar objetos que puedan exponerse á la intemperie, siendo su temperatura de fusión tan baja; así es que el calor más moderado produce en ella tal efecto, que las bujías que están formadas de parafina, se pliegan sobre si mismas, lo que las hace perder no poco de su mérito, pero se la emplea como auxiliar en algunos sistemas de aisladores, como hemos dicho, y por eso la damos a conocer.

El avanzado lugar que la madera ocupa en la escala de los cuerpos aisladores, indica desde luego que no debe emplearse para la confección de estos, pero á la vez la pone en primer término para utilizarla en la constitución de los apoyos, como en general se hace, á lo cual contribuyen además de esta causa, otras que examinaremos en el lugar correspondiente.

"Tratado elemental de telegrafía práctica"  Francisco Pérez Blanca
Establecimiento tipográfico de Manuel Minuesa de los Ríos, 1881