La imagen del Cristo-Juez del Juicio Final suele representarse con las manos alzadas enseñando las palmas extendidas hacia el espectador y con el torso descubierto. En torno a Él cuatro ángeles sostienen los instrumentos de la Pasión (las arma Christi). El objeto de todo ello es dar testimonio del sufrimiento de Cristo en su Pasión, a través de la visión de sus llagas y de los objetos de su martirio.

Los dos personajes arrodillados de los extremos son la Virgen y San Juan Bautista (conocidos por el término bizantino deDeesis). Su presencia obedece a su papel de intercesores ante Cristo por la salvación de los resucitados. De ahí su actitud implorativa, rogando a Dios misericordia en el momento del juicio.