CLICAR PARA VER IGLESIA VER LEYENDA IR A HISTORIA HISTORIA HISTORIA PÓRTICO PÓRTICO Ir al  pórtico  
     
   
     
Ir a la página   1/6   2/6   3/6   4/6   5/6   6/6
 
 

 

 

  Pulsa para verla a toda pantalla

La iglesia con su pórtico románico es el edificio más antiguo de la población. Está declarado como Bien de Interés Cultural por la Junta de Castilla y León y ha sido objeto de numerosos e importantes estudios.

Hoy podemos acercarnos a ella conociendo muchos detalles que hasta ahora ignorábamos.

Todo gracias al trabajo de Juan Carlos Oliva Mateo de la Universidad de Valladolid y a la empresa eléctrica Iberdrola que sufragó la beca para su estudio. Los textos aquí expuestos pertencen a ese trabajo.

          
 

 

 

  Ver el nuevo acceso a la iglesia
 
 
     
 

 


Añade esta página a "Favoritos"

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

   

1. LA IGLESIA
La Parroquia de Nuestra Señora de la Concepción domina el pueblo desde un altozano, quedando la aldea al Sur-Oeste del templo, mostrándonos a primera Vista su sobrio muro norte repleto de contrafuertes y sin ningún vano. Atravesando el pueblo por sus irregulares calles, ascendemos hasta la iglesia y nos encontramos con la galería que se abre al frontón (antes plaza mayor) con siete arcos que, según la leyenda, se abrieron milagrosamente para que los Siete Infantes de Lara entraran por cada uno de los ellos a la iglesia tras habérseles aparecido la Virgen mientras almorzaban en la llamada "Sierra del Almuerzo"(TARACENA, B. y TUDELA, J., Guía artística de Soria y su provincia, Madrid, 1962, pág. 123).

Todos los autores consultados destacan como parte más importante del templo su pórtico, ya que constituye el ejemplo de iglesia porticada más oriental de Castilla, siendo éste el último eslabón de la cadena de iglesias sorianas de este tipo en su avance ascendente por la Ribera del Duero.

1.1 Etapas constructivas y restauración.

No nos ha llegado ningún documento sobre la fundación de la iglesia, pero todos los autores consultados coinciden en fechar la primera construcción del templo bien avanzado el siglo XII, fecha ésta a la que pertenecen los elementos más antiguos de la construcción: el muro sur y la galería porticada.

A mediados del siglo XVI se proyecta una reconstrucción de la iglesia en estilo Gótico, pero a fines de siglo se abandona este proyecto al concluirse la cabecera, por ser demasiado ambicioso para las posibilidades económicas de la aldea.

En 1596 se pide licencia al Obispado para comprar un nuevo retablo para la nueva cabecera, ocupándose de su construcción el arquitecto Francisco Rodríguez con una traza muy clasicista influida por lo que se está haciendo en el Escorial. Los contrafuertes que refuerzan el muro Norte, que es el más afectado por la topografía, fueron levantados entre los siglos XVII y XVIII probablemente (Interpretación hecha por el equipo que restauró la iglesia en 1984, dirigido y coordinado por Fernando de Cobos Guerra y José JaVier de Castro Fernández).

La espadaña que aloja las campanas, fechadas éstas en el año 1894, es un añadido del siglo XIX, y será ésta la última intervención arquitectónica en el edificio hasta su restauración.

En 1983 se declaró "Monumento de Interés Histórico-Artístico" a la Parroquia de Nuestra Señora de la Concepción de Omeñaca, y un año más tarde se procedió a la restauración de su pórtico, único en este enclave. La restauración consistió en despejar dos arcos que estaban cegados siendo utilizada la parte derecha de la galería como silo que alquilaba la parroquia a los agricultores de la aldea a cambio de una parte de la cosecha. Además, se eliminó la pintura azul que cubría el interior del pórtico dificultando la Visión de los canecillos que hay sobre la entrada. Consideramos que la restauración del pórtico fue correcta, ya que se respetó el orden de las piedras, así como las marcas de cantero importantísimas a la hora de seguir la estela del constructor de la iglesia: Por el contrario, quedó desatendida la reparación del resto del edificio, y hoy presenta un estado desolador y lamentable.

1.2 Planta, alzado y cubiertas1(La planta y el alzado han sido tomados de los planos del proyecto de la restauración realizados por Leopoldo Gil Cornet en noviembre de I984. Servicio Territorial de Cultura de Soria). .

En Omeñaca se sigue el tipo de planta más usual y característico de la provincia, es una iglesia de una sola nave con cabecera, en este caso plana, aunque lo más común es que éstas se hagan de forma absidal. Pero, sin duda, lo más extraño es encontrar en esta parte de Castilla un pórtico donde, según Sainz Magaña, (SAINZ MAGAÑA, M E., El románico Soriano. Estudio simbólico de los monumentos, Edit. Univ. Complutense de Madrid, I984, pág. 390) las influencias vendrían de la región de Soria y Agreda y la galería porticada es más propia del occidente de la provincia, elemento que se da sobre todo en la orilla derecha del Duero, en la zona del románico más primitivo (San Esteban, Andaluz, Aguilera...etc.), abandonándose en esta iglesia la tipología de nave única terminada en ábside abovedado predominante en esta zona, Fuensauco o Tozalmoro por ejemplo.

El origen de las galerías es oriental, de los narthex sirios, por eso lo encontramos en Castilla en las zonas más islamizadas, siendo la de San Esteban de Gormaz la más antigua del conjunto soriano. Esta galería es de forma rectangular alargada, sobresaliendo por la parte Occidental del muro de la nave. Por este lado el pórtico está cerrado. En el lado opuesto, hay una dependencia que únicamente comunica con el interior de la galería, y lo hace por medio de un arco de medio punto que arranca de un podio elevado. No sabemos con certeza que utilidad pudo tener, aunque al estar el cementerio adosado a esta parte de la iglesia, pudo servir de osario.

Hacia la plaza, en la parte Sur, la galería se abre con siete vanos, el central más ancho y apoyado sobre pilares sirve de acceso, y el resto apoyan, como podemos apreciar en el dibujo de la planta, en columnas pareadas.

El vano de entrada al interior de la nave está en el muro Sur, enfilada con el arco de acceso a la galería. A pesar de no ser un gran peso el que han de soportar, las jambas de la portada aparecen reforzadas y sobresalen de la línea del muro.
El interior de la nave es amplio y despejado, y los muros sobrios, siendo un arcosolio excavado en el muro meridional lo único que rompe la monotonía que presentan las paredes. La capilla mayor es de planta cuadrada cubierta con una sencilla bóveda de crucería gótica. La capilla se refuerza en las esquinas exteriores con dos contrafuertes dispuestos diagonalmente. A la derecha se abre un pequeño vano que da acceso a la pequeña y sobria sacristía.

El alzado del edificio nos muestra una gran limpieza de volúmenes donde apreciamos la enorme sencillez de este templo rural. Los muros de la iglesia son de sillarejo, utilizándose sillares en la portada y en el pórtico. Además, podemos apreciar que se trata de una talla tosca y eminentemente rural. También encontramos piedra de sillería tanto en los contrafuertes del muro Norte como en los de la cabecera, así como en las roscas de los arcos que cobijan las campanas.

La parte septentrional es básicamente un muro corrido reforzado por contrafuertes que se une a la capilla mayor, fortalecida por los mismos elementos en sus esquinas, presentando ésta mayor altura que la nave.

Desde el frente de la iglesia vemos la misma estructura con dos volúmenes principales, pero aquí se adosa el pórtico, con el arco central apoyado sobre pilares y los demás, de roscas muy irregulares, descansan sobre columnas de doble fuste con basa sencilla que arrancan de un podio de unos 80 cm. El pórtico se remata con un sencillísimo alero sustentado por canecillos lisos, sin decoración, este detalle nos indica que la iglesia pertenece a un periodo tardío del románico. La sacristía aparece embutida entre la galería y el contrafuerte de esquina de la capilla mayor, con una altura ligeramente inferior al pórtico.

Aparte de la puerta, hay únicamente tres pequeños vanos: el más grande (con unos 30 cm. de luz) está bajo la espadaña; hay otra pequeña apertura abocinada en la pared meridional de la capilla mayor; la tercera se encuentra en el muro al que se adosa el pórtico, a la derecha de la portada.