LOCALIZACIÓN

Las directivas de la Unión Europea obligan a todos los núcleos urbanos de menos de dos mil habitantes a depurar las aguas con sistemas de depuración natural antes del 2006.
Des de hace unos años se construyen en toda Europa marismas en las cuales se reproducen estos entornos naturales, si bien de forma mas sencilla, para depurar aguas residuales de pequeños núcleos urbanos. Su uso esta especialmente extendido al norte de Europa, y se ensayan y investigan diferentes estructuras de marismas artificiales para conseguir los mejores resultados. Optimizarlos es importante, especialmente en zonas en que el terreno es caro y se tiene que obtener el máximo rendimiento depurador por metro cuadrado.
En Cataluña ya hay cerca de 20 municipios como Gualba, al Montseny; Sant Hilari Sacalm, a La Selva; Marçà, al Priorat; Les Franqueses del Vallès; o Bigues i Riells, al Garraf, que depuran sus aguas con este sistema.

Depuradora de Gualba	Ampliación de la depuradora de Gualba

La planta depuradora de aguas residuales trata los vertidos del municipio de Bigues i Riells y de las urbanizaciones del entorno, que son aportados por unos colectores de aproximadamente 17,2 Km. de longitud. La planta depuradora hace un tratamiento biológico con tres balsas de lagunaje con aireación forzada.

En los Aiguamolls de l'Empordá, a la desembocadura del río Muga, se han creado una zona artificial de marismas que funcionan como a depuradoras de lagunaje al lado del río Muga. También se aprovechan las aguas residuales para el mantenimiento de zonas de marismas aptas para las aves acuáticas.

La nueva normativa de saneamiento de Gerona obliga a separar el agua de lluvia de la red de aguas residuales a partir desde el 2 de septiembre del 2005. El concejal de Medio Ambiente, Ponç Feliu, ha avanzado que esta normativa potenciará la minimización de las aguas blancas, el reaprovechamiento del agua y la red separativa. Esta diferenciación de la red será obligatoria aunque la calle donde se hagan las viviendas no esté adaptada, en previsión de unas futuras obras. La propuesta del consistorio es que las aguas pluviales tendrán que devolverse al medio y servir para el riego de huertas o parques. La normativa también señala que las urbanizaciones de más de mil metros cuadrados de zona verde o en piscinas con una lámina superior a 40 metros cuadrados haya contadores de agua, que tendrán que servir para regar las zonas verdes. Las casas aisladas tendrán que hacer depuración en lagunaje.