Trabajo de investigación. Memoria o informe

   
 

 

 

Estructura de la memoria ( o informe)


La redacción del trabajo consta de tres partes diferenciadas:
 

    Una introducción:
    Es la base teórica en la que se fundamenta el trabajo. En ella se enuncian las directrices de trabajo (por qué se ha escogido el tema, cuáles eran las hipótesis que se querían demostrar, cuál ha sido el método de trabajo empleado, la bibliografía usada, la distribución del tiempo en los diversos aspectos trabajados, etc...)

    Cuerpo del trabajo:

    Es la parte esencial del informe y la más compleja ya que en ella se da a conocer el contenido del estudio. Está compuesto por los capítulos, apartados y subapartados que recogen el contenido del estudio.

    Ha de distribuirse en capítulos o secciones con sus respectivos apartados y subapartados. Cada capítulo o sección ha de tener sentido por sí mismo  y a la vez mantener cierta unidad con el resto de los capítulos. Cada capítulo comenzará en una hoja aparte  e irá encabezado por un titulo tras el cual se dejarán dos o tres líneas en blanco.

    La redacción de cada una de los capítulos partes ha de ser cuidada, procurando que las frases sean claras y comprensibles, marcando las relaciones entre párrafos mediante enlaces adecuados para que la lectura resulte ágil y fluida . La exposición, en definitiva, ha de ser coherente.

    Conclusión
    Es la parte en que se realiza una síntesis de los datos aportados y de los resultados obtenidos. Debe contener un resumen breve y coherente de los aspectos esenciales del trabajo, además de un comentario de los resultados a los que se han llegado y que hablan sido anunciados en la introducción. La conclusión no debe ser muy extensa, pero tampoco debe producir la sensación de que el trabajo acaba bruscamente.  De hecho, siendo como es la última impresión que el lector/a tiene de un trabajo, merece siempre una especial atención.

Además, en el informe debe haber :
 
  • Portada o cubierta: en ella constan como datos  título, autor/a, materia, centro, curso académico, localidad, fecha.
  • Índice:  Suele colocarse al principio del trabajo. Aparecen delimitados en él los capítulos, apartados y subapartados con indicación del número de página.
  • Bibliografía: Ordenada alfabéticamente y según los criterios del documento “Fuentes de documentación”
  • Notas: Sirven para puntualizar, aclarar o ampliar algún aspecto del discurso;  hacen referencia a obras, autores u opiniones; refuerzan la argumentación y dan carácter erudito al trabajo. Las notas permiten introducir precisiones y digresiones que entorpecerían la exposición. Según la función que realicen, podemos clasificar las notas en cuatro tipos distintos:
        1. Notas de comprobación. Indican la fuente de determinada afirmación o comentario.
        2. Notas de ampliación.  Muestran aspectos secundarios que poseen cierto interés para un determinado tipo de lectores.
        3. Notas de clasificación.  Sitúan y explican determinados pormenores que no conviene explicitar en el texto.
        4. Notas de sugerencia.  Señalan algún aspecto que tiene cierta relación con otros temas.
     
  • Anexos o apéndices: Sirven para aportar documentación complementaria que añaden valor al trabajo. Los apéndices reúnen todos los documentos o reproducciones que amplían, ilustran o complementan un trabajo y que, por su peculiaridad o volumen, no se pueden integrar en el texto o a pie de página. Los anexos deben contener un conjunto coherente de material, en ningún caso deben dar la sensación de que su presencia corresponde únicamente a la necesidad de engrosar el trabajo.
 Extensión de la memoria

El trabajo presentado por un solo alumno debe tener una extensión mínima de 15 páginas y máxima de 30 de las cuales 2 ó 3 serían de introducción, 2 ó 3 de conclusión y el resto, para el cuerpo del trabajo, aproximadamente.

Los trabajos presentados en grupo incrementan 10 páginas por cada uno de los miembros que componen el equipo.

  Aspectos de formato


El aspecto visual de cualquier trabajo es muy importante. Un trabajo mal presentado influye negativamente, mientras que una buena presentación crea una expectativa favorable.  Hay que establecer, pues, un criterio de presentación (o formato) que afecte a todos los elementos visuales del informe.

Deben tenerse en cuenta ciertos aspectos formales en la presentación de un informe:

  • Ha de emplearse una sola cara de la hoja de papel, tamaño DIN-A4
  • Debe estar escrito a máquina o con ordenador
  • Los márgenes han de ser amplios (2,5 cm).
  • Cada capítulo o sección debe comenzar en una página nueva. A principio de capítulo, el margen superior deben ser aún más amplio (7 ó 8 cm)
  • El interlineado será de 1,5 y, siempre que sea posible, el texto ha de ir  justificado
  • Se elegirá una familia de letra legible (Times New Roman) para el cuerpo y otra distinta para los títulos (Arial o Verdana)
  • El cuerpo de letra, si se escribe a ordenador será de 10 ó 12 puntos.
  • Los títulos hay que escribirlos en mayúsculas y asignarles un cuerpo de letra más grande (entre 14 y 18 puntos). Después del título hay que dejar 2 ó tres líneas en blanco.
  • Hay que diferenciar títulos, subtítulos y encabezamientos de apartados mediante recursos tipográficos (tamaño y atributos de letra)
  Paginación
  • Todas las páginas del informe han de ir numeradas. Así se facilita la confección de un índice que permita localizar los capítulos con facilidad. Los números deben ser pequeños pero visibles.
  • Las páginas de principio de capítulo no suelen ir numeradas.
  • La portada, el índice, la página de agradecimientos -si la hay - y las que contienen exclusivamente imagen o gráficos no se suelen paginar.

 Revisión final de la memoria

Corrección

Antes de entregar el trabajo es preciso releer y revisar todo el texto con la finalidad de eliminar cualquier error o defecto que sin damos cuenta, hayamos podido cometer. Es conveniente que entre la redacción y la revisión del trabajo transcurra cierto tiempo; de esta forma, la corrección ser más crítica y escrupulosa y mejor el resultado.
 

Revisión formal

Consiste en corregir todos aquellos errores ortográficos, sintácticos y de estilo que podamos haber cometido en la elaboración del texto.  También hay que revisar algunos aspectos de formato: Deberá constatarse que la numeración del índice se ajuste correctamente a las páginas en que empiezan los diferentes capítulos y apartados, la numeración de las notas, la organización del índice y la bibliografía...
 

Revisión de contenido

Repasar los aspectos relacionados con el contenido del trabajo, la correspondencia entre el índice y las secciones, asegurarse de que los argumentos son coherentes, procurar que el discurso sea comprensible para cualquier lector/a no iniciado en el tema y finalmente, revisar que exista cierta continuidad entre la introducción, el desarrollo y la conclusión.