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Cristianismo
Si la visión de la Amáscoa del siglo VIII coincidiera con la realidad histórica, me atrevería a decir que no encuentro momento más oportuno para que el Cristianismo penetrara en este nuestro rincón aislado y escondido. Pero dejándolo por ahora en el terreno de las hipótesis, y ciñéndonos a testimonios de la letra escrita, nos encontramos con que los dos primeros documentos referentes a nuestro valle son de carácter religioso. El primero se halla en el Becerro de lrache (año 1068) y en él se registra una donación que el rey Sancho IV (el de Peñalén) hace al monasterio de Ira- che y a su abad Veremundo y a los demás hermanos que allí habitan, de un Monasteriolo al que llaman Erdoiza en la región de Améscoa. Erdoiza es hoy una faja de terreno cultivado, mugante con el molino de Zudaire. entre el río Urederra y la carretera de Baquedano, El segundo documento se halla en el archivo de la catedral de Pamplona: en él se dice: “Sancha dona a Santa María de Pampiona y a su Obispo Sancho y a los Canónigos, el Monasterio de Urra en Améscoa con todas sus pertenencias”. (Año 1126). Pudieron ser estos monasteriolos elementos de cristianiza ción en épocas anteriores los que, una vez cumplida su misión fundacional, son donados a monasterios más poderosos.